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El PSOE-A quiere que Susana Díaz sea el “símbolo” de la conferencia política del partido

Mario Jiménez defiende el papel protagonista del PSOE-A en la conferencia política.

Olga Granado

El PSOE-A quiere que la expectación que en ciertos círculos ha levantado Susana Díaz en su estreno como presidenta de Andalucía les sirva para posicionarse en Madrid. De momento, en la conferencia política que el PSOE celebra entre el 8 y el 10 de noviembre, será la que venda el producto. En este sentido, pese a que todavía no será la secretaria general -dado que su elección será en el congreso regional extraordinario de los días 23 y 24 del mismo mes en Granada- sí será la voz del PSOE-A.

Su vicesecretario general, Mario Jiménez, ha dicho este lunes que Susana Díaz es “un símbolo muy claro y contundente de lo que se persigue con la conferencia política”. No ha definido cómo se articulará la participación de la presidenta en ese cónclave pero ha dejado claro que “va ser muy importante en términos de mensaje y de pronunciamiento político, sobre todo, porque Andalucía está administrando un proyecto de gobierno”.

Varios grupos de trabajo ultiman las propuestas que llevará el PSOE-A para ese encuentro, y que pretenden presentar los próximos días. Junto a la limitación a dos de los mandatos en los gobiernos nacional y autonómicos, como ya anunció su todavía secretario general José Antonio Griñán, figuran otras medidas, como el compromiso por una mayor transparencia en las instituciones y, especialmente, propuestas orientadas a recuperar la confianza de la ciudadanía, a lucha contra esa “desafección” que se ha convertido en la palabra recurrente en los discursos de los políticos, que por en contrario no parecen saber cómo atajarla.

En realidad todo está relacionado, como el debate para conseguir una verdadera democracia dentro del propio partido. La cuestión de que las primarias está sobre la mesa. De hecho, desde Madrid ya están estudiando cambios, y el PSOE-A quiere hacer su aportación porque no en vano ha sido el propio proceso de elección de Susana Díaz como candidata a las próximas elecciones autonómicas el que ha despertado las críticas y dudas sobre el modelo.

La clave está en las primarias

Las primarias por las que fue designada Susana Díaz son el ejemplo más claro porque son el más reciente, y han dejado en evidencia que la maquinaria hurta la posibilidad de alternativas. Se está trabajando en la manera de articular la exigencia de avales -las firmas que deben presentar los que quieren ser candidatos a algo en la formación- y en otros mecanismos. La propia Susana Díaz ha hablado ya clararmente de primarias abiertas, es decir, donde no sólo vote la militancia.

Ha negado el número 2 del PSOE-A que en la conferencia política se vaya a abordar la sucesión del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, o su continuidad. Ha dicho que no es el foro para ello, si bien muchos socialistas consultados coinciden en que sí se va a hablar de este tema. Mario Jiménez se ha limitado a decir que “es una decisión personalísima, en el cuándo, de qué manera y en qué sentido se pronuncia”.

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