“Los geoparques tienen un papel esencial en la lucha contra el cambio climático”

El presidente de la Red Mundial de Geoparques, Nickolas Zouros, ha estado estos días en la evaluación del Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, uno de los 12 de España que integran la misma y que este año debe revalidar dicha condición. Es uno de los cuatro iniciadores en 1996 de la idea de geoparque, que en 2000 se plasmó con la constitución de los cuatro primeros y en 2015 con la creación de la etiqueta por parte de la Unesco, configurándose una red de parajes que cuentan la historia del planeta y de los acontecimientos geológicos que le dieron forma.

En estos momentos, la red cuenta con 127 espacios. Tras China, España es el segundo país con más geoparques. ¿Por qué cree que cree que ha despertado tanto interés en España este programa?

Hay tres razones, básicamente. Primero, España tiene una rica herencia geológica, y muy diferente según las regiones. La segunda es que muchas de estas localizaciones ya están en áreas protegidas, por lo que hay una predisposición hacia un reconocimiento más. La tercera razón es que la gente entiende este concepto, que no olvidemos, nació en el Mediterráneo. 

¿Y cuál es ese concepto?

El concepto de geoparque no se basa sólo en la protección y valorización de esta herencia, sino sobre todo, la conexión entre el ser humano y el planeta. Las rocas, los paisajes, los recursos que posibilitan las civilizaciones, pero también el ecosistema que está afectado por diferentes condiciones geológicas, y por encima de eso, las comunidades de personas, todo ello conectado. La vida viene de la tierra y terminaremos en la tierra. No hay necesidad de probar esa conexión. Pero hay que reforzar esos nexos que a su vez generan riqueza y respeto hacia la naturaleza. 

¿Cómo se creó el concepto?

Es un concepto hecho a mano. Empezamos con cuatro territorios en Europa (en Alemania, Francia, España y Grecia) y en 15 años conseguimos una red que hoy llega a los cinco continentes. Es una idea construida de abajo arriba. Si la gente cree en el concepto, puede unirse a la red. Hay sitios con una herencia geológica de máximo valor, pero que nunca se convertirán en geoparques, por ejemplo los que no están habitados. Es una red de excelencia debido a la reconexión de las comunidades locales con la madre tierra.

¿Existe la posibilidad de recuperar esa conexión en un mundo globalizado?

En la sociedad contemporánea se ha perdido esa conexión, por lo que se trata de reconectar a los seres humanos con los principales valores del planeta, que no son sólo los aspectos geológicos, sino también morfológicos y culturales.

¿Cómo ha evolucionado el concepto desde su creación hasta hoy?

Nos costó 15 años desde la fundación de la primera red de geoparques en Europa hasta convertirnos en un programa oficial de la Unesco en 2015. Esto nos ha beneficiado, porque tener detrás a la Unesco ha supuesto un salto. Nunca olvidaré la conferencia de la Unesco en 2013. El embajador de Mozambique expuso que él venía de un país sin geoparques y que, tras oír la presentación del programa donde pedíamos el apoyo de la Unesco, le quedó claro que teníamos que tenerlo. Dijo que si no hubiéramos ido con el proyecto, la Unesco debería inventarlo porque la idea de los geoparques está en la base de décadas de declaraciones de este organismo.

Hable del sentido práctico de los geoparques.

Efectivamente, el segundo pilar es el uso de esta herencia. Para los iniciadores de los geoparques, éstos pueden ser una herramienta de desarrollo haciendo a la gente creer que es esta herencia es clave. Porque si perdemos nuestras raíces, no tenemos futuro. Es muy importante reconectar a esas comunidades locales con su herencia para promover su protección y generar beneficios económicos para las mismas.

¿Pueden contribuir a evitar el despoblamiento de las áreas rurales?

En las áreas rurales, donde las comunidades locales están muriendo porque no hay futuro para los jóvenes, se puede conseguir que éstos inviertan en su entorno y creen nuevos puestos de trabajo. Porque se trata de entender la preservación de esta herencia no como limitación, sino como oportunidad para generar nuevos modelos de desarrollo. No pedimos inmensas inversiones, sino usar los recursos que ya exigen en estos geoparques.

¿Cómo puede hacer atractiva la vida en un geoparque?

En todo el mundo se pueden encontrar estos tesoros escondidos que pueden tener un segundo uso que, garantizando la preservación de este pasado, genere nuevas oportunidades para la supervivencia de la humanidad en unas condiciones de alta calidad de vida, lo que se está perdiendo y no se puede encontrar, por ejemplo, en las grandes ciudades. Pero no sólo en calidad de vida. Un ejemplo: cuando hay grandes concentraciones de gente, en caso de un desastre natural, las consecuencias son mucho peores que para los que viven en áreas rurales.

También hablan de desarrollo sostenible...

Hoy día todo el mundo habla de desarrollo sostenible, pero me pregunto realmente cuántas de las actividades que están consideradas bajo este concepto lo son realmente. Creo que reconstruyendo esta relación propiciamos de verdad el desarrollo sostenible, donde se usan los recursos que ya existen en el territorio.

¿Cómo se crea un geoparque?

Un geoparque se construye desde el deseo de la gente y el convencimiento de que puede ser una solución a sus problemas. No es una decisión de un gobierno, sino de pequeñas comunidades de personas, que se convencen de que determinadas restricciones y regulaciones no son limitaciones, sino que protegen sus recursos.

¿Por qué los geoparques tienen tantas evaluaciones?

Los geoparques no funcionan como sellos en el que la red los evalúa y los otorga para siempre. Trabajan con continuas evaluaciones porque lo difícil es mantener esa elevada calidad en las condiciones que permitieron la designación. Lo más difícil es mantener la implicaciones de la gente, desarrollar continuamente actividades de gran calidad que impliquen a sus jóvenes...

¿Qué impresión se lleva del geoparque dela Sierra Norte de Sevilla?

En este territorio he encontrado cosas muy interesantes. Más allá de ser un ecosistema único con productos de muy elevada calidad, me ha impresionado por la conexión del parque natural con sus habitantes. He encontrado a gente que cree en eso y es lo más importante. No hay geoparque perfecto y mucho se puede mejorar, pero se puede, si existe esa conexión entre la gente y el lugar. He visto jóvenes con proyectos para turistas con servicios de muy alta calidad, emprendedores que han sido capaces de crear experiencias en gastronomía únicas... Para mí, es lo más positivo porque los recursos existen, la belleza del paisaje, la riqueza geológica única de lugares como Cerro del Hierro... pero lo importante es que la gente lo cree.

Defienden que los geoparques no sólo muestran evidencia de los cambios climáticos en el pasado, sino que también informan de los desafíos del futuro para prepararse para riesgos tales como terremotos, tsunamis y erupciones.

Sí. Son la huella de cambios climáticos del pasado. Nos recuerdan que no es un problema que vendrá, sino que está aquí. Tenemos el recuerdo del pasado y si no prestamos atención, podemos hacer frente a las mismas consecuencias. Tienen un papel esencial en la lucha contra el cambio climático. 

¿Pero cómo  trabajan para concienciar?

Con la educación. El potencial del geoparque no es sólo proteger el medioambiente, sino saber envolver a la gente en cuáles son realmente sus retos para afrontar lo que viene. Con esos testimonios de cambios climáticos, en los que puedes poner tu dedo sobre los resultados, aportamos la interpretación.

¿Cómo valora la contribución de los fondos europeos para el desarrollo rural?

Es tremendamente difícil porque se han repartido cientos de millones de euros en fondos europeos pero en España, y también en mi país, no se ven los resultados. Porque la gente no cree en una idea. Sino que se esperan unos fondos europeos con una aparente buena idea para gastarlos. Pero esto no es sostenible en el tiempo. Por eso es clave que contribuyan a la autonomía. Los recursos públicos no son infinitos. Tenemos por ejemplo los incendios forestales donde lo que falta son voluntarios que se sumen a las autoridades para hacer frente a estos desastres. Hace falta entusiasmo para un futuro mejor. Es la mayor contribución de los geoparques para el desarrollo sostenible.

El turismo se ha convertido en una de las fuentes de ingresos para estos geoparques. ¿Cómo se hace para que sea sostenible?

El turismo puede ser positivo, pero de una manera innovadora, donde el visitante se vea como un invitado que en nuestras áreas rurales encuentra hospitalidad, productos del lugar y sobre todo experiencias... Se trata de descubrirles cosas nuevas que van a más allá de relajarse en unas vacaciones, y por supuesto garantiza huir de la masificación. 

Un ejemplo: en su región, Lesbos, hay un geoparque y recientemente sufrieron un terremoto. ¿Cómo contribuyó la labor desarrollada por el geoparque?

Un terremoto es el mejor ejemplo para demostrar cómo la educación con el modelo de los geoparques puede contribuir a minimizar las consecuencias sobre las personas. Lesbos es una isla con mucha actividad sísmica. Cuando se inició este proyecto de geoparque sabíamos que era clave educar sobre cómo hacer frente a estas situaciones, donde la base está en evitar el pánico. Desde hace 10 años llevamos a cabo de manera estable un proyecto para educar a los escolares y a sus familiares sobre los terremotos. El pasado 12 de junio, en la escuela del municipio más afectado, donde la mayoría de los edificios se vinieron abajo, se salvaron todos los niños. Habían visitado nuestro centro de interpretación cuatro días antes. El colegio se caía, la profesora les dijo “haced lo que sabéis”. Se metieron bajo los pupitres para protegerse. Ella no dejó de hablarles todo el tiempo para calmarlos. Y  consiguió sacarlos a todos a salvo. Es el mejor ejemplo de cómo la educación desde el geoparque salva vidas. Después de un terremoto, cuesta menos recuperarse cuanto menos sean las víctimas mortales, especialmente si son niños, porque ese dolor bloquea demasiado, y lo digo porque he vivido proyectos de reconstrucción.

Finalmente, ¿por qué todavía hay tan pocos en países donde hay pequeñas poblaciones donde aparentemente existe más conexión con la tierra?

Una de las razones es precisamente que donde todavía tienen esa conexión, no se dan cuenta de lo importante que es, mientras que si se pierde, es cuando se valora. Lo mismo que cuando te falta la salud y te das cuenta de que es lo más importante. Tampoco podemos perder de vista que hay países muy pobres, donde si están ocupados en solventar necesidades básicas, no pueden plantearse otras cosas. Los seminarios que llevamos a cabo están contribuyendo a potenciarlos. Soy optimista con lo que estamos sembrando en América del Sur y en África también.