Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

El caso de las presuntas torturas a un ciudadano alemán llegará a juicio

Parque Natural Cabo de Gata.

Néstor Cenizo

El juzgado de Instrucción número 5 de Almería cree que hay indicios de que varios agentes de la Policía Local de Níjar golpearon a un ciudadano alemán y le causaron lesiones durante su detención en comisaría, la noche del 18 de abril de 2014, por lo que ha dado plazo a la acusación y al fiscal para acusar o pedir el sobreseimiento. Los abogados de la supuesta víctima ya han anunciado que acusarán, por lo que el caso llegará a juicio. Paralelamente, pero en otro procedimiento separado, la Audiencia Provincial de Almería deberá juzgar al ciudadano alemán por las denuncias formuladas contra él por los agentes de policía, que le acusan de atentado contra la autoridad.

Törsten (nombre ficticio) denunció en abril de 2014 que durante la madrugada del Jueves Santo agentes de la policía local le tiraron al suelo en la terraza de un bar de Níjar, le esposaron y, después de arrastrarlo calle abajo, le golpearon antes de llegar a la comisaría y en el interior. Según relató en su día a eldiario.es/Andalucía, los agresores fueron dos policías que escucharon “un comentario malo” al paso de la procesión y le ordenaron callar. El auto, dictado por el Juzgado de Instrucción 5 el pasado 8 de enero, confirma que hay indicios de que el relato es cierto y esos dos policías le agredieron causándole lesiones, por lo que da traslado a las partes para que formulen acusación. Hay otros dos policías investigados por, supuestamente, no intervenir para detener la agresión.

El abogado de Törsten ya ha manifestado su intención de acusar. En el juicio se determinará si se cometieron delitos de lesiones, torturas y atentado contra la integridad moral. Las torturas graves están castigadas con penas de uno a seis años prisión, según su gravedad, e inhabilitación de hasta doce años; los delitos contra la integridad moral cometidos por funcionarios se castigan con penas de seis meses a cuatros años de cárcel e inhabilitación de hasta cuatro años. En función de estas penas, es muy probable que el caso lo juzgue la Audiencia Provincial.

El hombre, que tiene 57 años y lleva cerca de una decena en España, explicó en su momento que fue esposado a una silla y golpeado repetidamente. “Yo estaba sangrando y seguían pegándome”, dijo a eldiario.es/Andalucía. En su declaración ante el juez denunció que los policías usaron “una técnica de combate de forma que un agente puso la mano de una forma determinada para darle en el oído, le dio en el oído y le perforó el tímpano”. También relató humillaciones verbales: “Tú eres alemán, para mi eres una mierda, vete de aquí, de Nijar”. Presentó cuatro partes médicos que acreditaban hemorragia nasal y perforación del tímpano del oído izquierdo de origen traumático, producida, según él, por un golpe seco realizado por un policía. Ya en el primer parte indicaba haber sido objeto de una agresión.

Un testigo, a los agentes: “Pero bueno, ¿qué habéis hecho?”

Su relato fue corroborado por su esposa, que declaró que vio cómo le arrastraban en las escaleras de comisaría, y por un camarero, que contempló la escena de la terraza del bar. Según dijo éste ante el juez de instrucción, un agente recriminó a Törsten que aplaudiera al paso de la procesión. El alemán siguió hablando con su mujer “más bajo de lo normal”, pero el policía insistió: “Si no te callas te llevo conmigo”. Poco después le pusieron las esposas sin resistencia y se lo llevaron a comisaría. Veinte minutos después, el camarero se acercó a comisaría para devolver una bolsa olvidada y se encontró a Törsten, ensangrentado, custodiado por dos agentes. “Pero bueno, ¿qué habéis hecho?”, les preguntó. A lo que un policía se encogió de hombros: “¿Yo?”.

En un principio, el juzgado había decidido archivar el caso, pero la Audiencia Provincial corrigió esa decisión, al entender que hay motivos para que el caso llegue a juicio. Las lesiones acreditadas son compatibles con el maltrato denunciado, dice la Audiencia. El testimonio del camarero (“del que en principio cabe predicar absoluta objetividad”, según la Audiencia) y el de la mujer son la principal prueba incriminatoria, además de los partes médicos.

El inspector jefe de la Policía Local, José Gázquez, explicó en su momento a eldiario.es/Andalucía que en la detención de Törsten fue necesario emplear la fuerza, lo que no concuerda con la declaración prestada por el camarero. “Él se encara y atenta contra el policía y hay que reducirlo, con la dificultad que eso conlleva”, relató el inspector. También aseguró que no había cámaras de seguridad en la comisaría porque ésta era provisional.

No es la primera queja que los vecinos de Níjar denuncian agresiones de la policía. En el Pleno de septiembre de 2013 IU y PSOE pidieron la convocatoria de la Junta Local de Seguridad, después que vendedores ambulantes de la playa de San José denunciaran el supuesto abuso policial.

Etiquetas
stats