La reforma laboral deja “un mayor empobrecimiento” social, según CCOO-A

El bienio 2012-2013 ha dejado en la cuneta del desempleo a 226.000 personas en Andalucía. De estos, 62.300 empleos corresponden al sector público. Mientras, un 54,3% de los parados andaluces de larga duración no tiene ningún recurso. Y la población que percibe rentas salariales inferiores a la mitad del salario mínimo (4.517 euros anuales) supera el millón de personas.

Estas cifras, según un informe de CCOO-A, indican cómo las sucesivas reformas laborales han acelerado “la destrucción de empleo”. Tres años después, la última revisión trae “un mayor empobrecimiento de la sociedad”, apunta el sindicato. Destrucción de empleo, precariedad laboral, inestabilidad, temporalidad, falta de protección y merma de los servicios públicos.

Son las rémoras, las “falacias” sostienen, de una reforma laboral impuesta por el Gobierno presidido por Mariano Rajoy (PP) que deja a mujeres y jóvenes menores de 25 años como las franjas de población más castigadas desde el estallido de la crisis. Junto al secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, han participado en la presentación del informe Principales efectos de la reforma laboral de 2012 la secretaria de Empleo y Política Institucional del sindicato, Nuria López, y su homóloga de Acción Sindical y Relaciones Laborales, Miriam Pinillos.

Un 46% lleva más de dos años en paro

En esta sociedad más pobre subsisten más de la mitad de los desempleados en Andalucía sin ingresos, sin ningún recurso económico, según el informe de CCOO-A. “En 2014, más del 46% de la población supera los dos años en desempleo” al tiempo que más “de un millón de trabajadores, un tercio del total de asalariados, cobran menos del SMI”, manifiesta López.

La aceleración del proceso de destrucción de empleo, aseguran, provoca que se hayan perdido un 69% más que en los dos años anteriores a la reforma de 2012: 226.000 puestos de trabajo. De estos, 62.300, públicos. 61.000 indefinidos. Según Carbonero, CCOO quería hacer públicas las cifras antes de la Encuesta de Población Activa (EPA).

“La tasa de contratación indefinida ha pasado del 6% al 3,3%”, refieren, y los trabajos a tiempo parcial, del 23% en 2011 al 31% en 2014. Un ritmo que hizo aumentar en 216.300 personas la bolsa de desempleo, que el sindicato sitúa en una cifra total superior a 1,4 millones, pese incluso a la proliferación de los denominados “falsos autónomos”.

Mujeres y jóvenes, los grandes castigados

Pero el gran castigo de la crisis, a nivel de destrucción de empleo, está centrado en “mujeres y jóvenes”. Segmentos de población afectados de manera específica. “Entre 2011 y 2013 se han perdido más de 69.627 mujeres asalariadas” y la tasa de paro subió del 32% al 38% en esos años. Los trabajadores menores de 25 años pasaron del 54% al 66 por ciento de 2011 a 2013 y esto, lamenta Nuria López, “obliga a los jóvenes a salir de sus comunidades y a las mujeres a quedar relegadas para tareas domésticas”.

Por su parte, el secretario general andaluz de CCOO alerta del aumento de la siniestralidad laboral. “Tras una caída del número de accidentes, en 2012 se produjo un repunte hasta los 3.425 siniestros por cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social”. A partir de ahí, el número crece por el descenso en el gasto en prevención de riesgos por parte de las empresas y porque los trabajadores “aceptan cada vez peores condiciones laborales por el miedo a perder el empleo”.

Si las perspectivas laborales no mejoran, advierte el dirigente sindical, arrancará “un proceso de movilizaciones”. Por eso pide a la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) “que se moje para procurar una mejora en las condiciones de los trabajadores”. Para ello plantea acuerdos como unificación de convenios colectivos, prevención de riesgos o políticas de igualdad y organización del trabajo.

En cuanto a la situación de la negociación colectiva, el sindicato indica que existen en Andalucía 1.470 convenios colectivos que afectan a 1,5 millones de empleados. De ahí, el 96% de las empresas están afectadas por convenios sectoriales mientras que en el año 2015 “hay 375 convenios pendientes de negociación” para medio millón de trabajadores, precisa María Pinillos.