Condiciones al petróleo

Comentaba en un artículo anterior una posible salida o solución para Canarias en un asunto escabroso como es el tema del petróleo, señalando que cuando hay intereses muy importantes, que podrían mover muchísimo dinero, hay que observarlos desde cierta distancia para no perder la perspectiva de la realidad. Argumentaba que el Estado defiende que es bueno para Canarias los sondeos, todos los informes técnicos son positivos a las extracciones, hablan que hay seguridad total para la actividad del turismo. Desde el primero al último militante del PP hablan de los enormes beneficios que generaría el oro negro. Pero el Gobierno de Canarias no está de acuerdo, dicen que es malo para la economía de las islas, para la actividad turística, señalando que no hay garantías de seguridad con las perforaciones y extracciones. Que Canarias no obtiene beneficios, hablan de un alto riesgo en la zona de perforación cercana a Lanzarote y Fuerteventura. Los Cabildos de esas dos islas han puesto el grito en el cielo, como es lógico y normal. Como se ve hay posturas encontradas.

Mirándolo desde esa distancia señalada, decía en ese artículo, que habría que afirmar que es bueno para España, ya que el país depende en una parte importante de ese combustible que debemos importarlo de los mercados internacionales. Se paga muy caro y afecta a la cesta de la compra, al nivel general de precios que se traslada al consumidor de aquí y de haya. Indicaba en ese momento que algo bueno para el conjunto del país puede ser malo para los canarios. Esos beneficios ¿compensan las posibles pérdidas que dicen afectarían a la actividad turística, el poner en riesgo innecesario a nuestra principal industria, perjudicar o poner en riesgo al ecosistema marino de las islas, etcétera? Continuaba señalando que abierta la batalla por el petróleo nadie renuncia a un palmo de terreno conquistado, era y es un diálogo de sordos. Unos y otros han lanzado una bandera al viento a favor y en contra.

No hay que ser un experto en la materia señalaba, para afirmar que de haberlo beneficiaría al conjunto del país y simultáneamente queda la duda más que razonable del coste-beneficio para el conjunto del archipiélago canario, sus mares y sus peces. Expresando que aquí estaba la parte importante del asunto, preguntándome, ¿para qué me arriesgo si no me aseguran y no me compensan adecuadamente las islas y el entorno marino? Las posiciones encontradas están muy claras. La decisión buena para Canarias es una negociada que nos beneficie claramente y de forma generosa para los intereses generales de las islas. De no ser así se abriría la confrontación con las banderas al aire. Esa posición continúo manteniéndola, ya que si se llega a un acuerdo con el Estado que beneficie a las islas de forma clara y cubriendo totalmente la seguridad del archipiélago, siempre será mucho mejor a que nos apliquen el decreto de las mayorías. Además, hablando con un geólogo sobre tal asunto y leyendo el artículo de la Provincia del señor Rafael González Pérez de 28 de agosto, doctor en ciencias geológicas, me tranquiliza que de cumplirse todas las medidas de seguridad el riesgo de daños para las islas en principio es inexistente. Pero evidentemente si lo quieren hacer por la geta, perjudicando al archipiélago, sin logros y beneficios para el interés general de Canarias, habría que patalear, confrontar y protestar. La postura del todo o nada, personalmente no me agrada porque te arriesgas a quedarte sin nada. El 28 de agosto los medios de comunicación señalan que Repsol se gastará 120 millones de euros en solitario (asunto que figura en el contrato firmado entre las partes) para ejecutar una primera cata (con posibilidad de dos más si tiene éxito la primera), en un punto denominado sandia (las otras dos: chirimoya y zanahoria) y que de haber beneficios de gas y petróleo serían en exclusividad para la empresa. Si esa es la situación correcta, pendiente de la última decisión de Repsol según la agencia EF de realizar el sondeo. Habría la posibilidades de encontrar gas y petróleo en un 33%, seguramente será algo más. Pero si la primera perforación es un éxito las probabilidades futuras aumentan y los ciudadanos canarios continuamos desconociendo de haberlo, las posibles economías de escala que generarían en las islas. Se habla que el Ministerio estudia la aplicación de un impuesto sobre los beneficios para el Estado de la extracción de esos hidrocarburos. Pero tan solo nos hablan de los posibles perjuicios y riesgos. Esas perforaciones según diferentes medios y lo publicado por canariasahora.com, se ejecutarían en otoño, como dice el otro ya. A una distancia de la costa entre 50 y 55,5 kilómetros, enfrente de Lanzarote y Fuerteventura. Las autorización para los sondeos del 13 de agosto, por parte del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, está condicionada a 14 cumplimientos y entre ellos a obligar a Repsol a un seguro de responsabilidad civil por un valor superior a 40 millones de euros y a unas garantías financieras por 20 millones de euros para cubrir costes de responsabilidad medio ambiental. Esa autorización de las prospecciones a la empresa por parte del Ministerio se eleva a tres años para el desarrollo de sus proyectos.

El presidente, señor Paulino Rivero, ha solicitado un pleno extraordinario en el Parlamento de Canarias para el próximo 4 de septiembre, a las 10 y 30 horas. El objetivo es fijar la fecha de la consulta popular sobre las prospecciones de hidrocarburos en la costa Atlántica. De darse un resultado en contra de los sondeos el Gobierno Canario podría conseguir una mejor negociación con el Estado ya que en el próximo mes de mayo hay consulta electoral. Al Gobierno del Estado y al PP un resultado en contra le haría pensar en alguna solución de compensación a Canarias. Para que ese asunto le produjera el menor desgaste político posible. Una actitud de total prepotencia le podría llevar al suicidio político en las islas. Pero de darse esa negociación Canarias podría conseguir unos recursos financieros extraordinarios que podría destinar de forma inteligente, a su principal problema, el generar políticas de empleo. El apuntarnos a burros, en expresión muy propia de los catalanes, no nos lleva a nada, y conseguiríamos entre todos perjudicar los intereses generales del pueblo canario. Eso no quita para continuar apretando al Estado ya que a Repsol y al señor Brufao, solo le mueve en buena lógica, un interés crematístico. Prueba de ello es la información del País del pasado 27 de agosto señalando que el señor Mijail Friedma, el segundo hombre más rico de Rusia, según la revista Forbes, con una fortuna de más de 13.000 millones de euros, ultima la compra de RWE DEA, socia de Repsol con un 30% en el proyecto canario de las prospecciones. Son verdaderos sabuesos. Huelen el dinero desde Rusia hasta las costas de Fuerteventura. Los tiburones de cuello alto y corbata son verdaderos depredadores del Sistema Económico. No hay peces grandes o pequeños que escapen a sus tentáculos cuando huelen pingues beneficios. Ya se sabe además, el pez grande devora al chico. Jamás se lo piensa, es la ley de la fauna salvaje.