La España eterna

Con tal de abatir a Zapatero todo le vale al PP. Incluso olvidar que Aznar acercó centenares de asesinos etarras y excarceló a decenas de ellos condenados a largas penas. Entre los beneficiarios, el propio De Juana. Mientras, ETA seguía matando y mantenía secuestrado a Ortega Lara. Pero había que ser “generosos”, decía Aznar entonces. Son antecedentes que deberían servirle al PP para aflojar un punto. Por vergüenza. Pero no puede hacerlo. Necesita hacer bulla para que no se hable tanto de corrupción y se note menos el desmontaje ante los tribunales de su teoría de la conspiración en el juicio del 11-M. Todo empezó ahí, con el 11-M. Zapatero ganó las elecciones y al margen de los que influyera en el resultado electoral el bárbaro atentado de Atocha, el hecho es que los peperos trataron de atribuir su autoría a ETA y de convencer a la opinión pública de que fue un plan criminal del que participó Zapatero para asegurarse la victoria.En este sentido, Miguel Ángel Rodríguez, ex portavoz del Gobierno de Aznar, acaba de afirmar que la clave de Atocha reside precisamente en averiguar qué grupo terrorista “puso a Zapatero en La Moncloa”. No fueron, pues, los votos sino las bombas. Rodríguez autoriza así a recordar lo que nadie ignora: las bombas fueron la venganza islamista por la participación de España en la invasión de Irak. Aznar se derretía por estar de figurón en las Azores con Bush y Blair y aparecer entre los promotores de la guerra y de aquella foto famosa hicieron los terroristas un poster que pegaron en sus paredes. Por eso, para ocultar la responsabilidad de Aznar, siembra el PP la crispación y el odio; además de violentar las instituciones del Estado de Derecho frente a la evidencia de la autoría islamista. Pero no le ha ido bien en el juicio del 11-M y tira ahora de De Juana Chaos para que no trascienda demasiado el fiasco y seguir derecho, a varar en las playas de la ultraderecha. Una vuelta a la semilla. Lo que nos aguarda en los próximos meses no será mejor que lo vivido en los tres años que llevamos de legislatura socialista. Los peperos hacen lo posible por enfrentar a los españoles y si lo consiguen no tendrán ellos la culpa, qué va, pues obedecen un mandato divino bendecido por el Dios de los obispos. La España eterna inició ya su Cruzada.