El PSOE tinerfeño, a por La Laguna

El PSC/PSOE tinerfeño ha decidido ir a por La Laguna, y de paso también a por Ángel Víctor Torres. El nuevo secretario de Tenerife, Pedro Martín, alcalde de Guía de Isora, ha dado instrucciones a las dos concejalas que aún conservan los socialistas en La Laguna, Mónica Martín y María José Castañeda, para apoyar una futura moción de censura contra el actual alcalde lagunero de Coalición Canaria, José Alberto Díaz, y me chisman desde la Ciudad de los Adelantados que se hará por fin realidad en el mes de enero. El Congreso de los socialistas tinerfeños que se celebró en Adeje la pasada semana puede dar un giro espectacular a la situación política en Canarias, porque La Laguna es para CC la joya de la corona nacionalista, y nunca mejor dicho porque los nacionalistas canarios son muy monárquicos franquistas/borbónicos. La herencia recibida por José Alberto Díaz de Fernando Clavijo, y este a su vez de Ana Oramas, puede significar una auténtica convulsión lagunera de prosperar la moción de censura.

El éxito de los socialistas tinerfeños que apoyan la moción de censura en La Laguna se ha basado en el sigilo, en una preparación de la asamblea congresual de Adeje con mucha discreción para no dar oportunidad a Ángel Víctor Torres a preparar una reacción de sus partidarios, entre ellos Mónica Martín, concejala en La Laguna, y verdadero “tapón” en toda esta legislatura municipal para que no se censurase a José Alberto Díaz con el que mantiene una buena relación política, y además por su “venganza” contra Santiago Pérez, concejal de X Tenerife, que en su día denunció al padre de Martín al estar presuntamente implicado en el asunto/trasunto de Las Teresitas. Los conductores de toda esta operación han sido el veterano militante del PSOE tinerfeño, Pedro Anatael Meneses, secundado por Emilio Fariña y Nicolás Jorge, que al final lograron un resultado aplastante a favor de la moción de censura, 59 votos a favor, 26 abstenciones y uno en contra.

Durante la asamblea, Mónica Martín trató de defender una vez más la alianza con Coalición Canaria en La Laguna, pero su intervención fue recibida con mucha frialdad inicialmente y al final con un total rechazo por parte de los asistentes. En Tenerife hay además una gran preocupación por el acercamiento de Ángel Víctor Torres a Fernando Clavijo, y todos los indicios y sospechas apuntan a que de cara a 2019 el acuerdo entre ambos significaría el reparto de Canarias. Tenerife para Clavijo y Gran Canaria para Torres, conformándose el actual secretario regional del PSC/PSOE con la Vicepresidencia de Canarias. Al final Pedro Martín, el nuevo secretario de Tenerife, muy “políticamente” se sumó a las filas de los abstencionistas, que mayormente proceden de las agrupaciones del Puerto de la Cruz, Santa Cruz de Tenerife y El Rosario. Mónica Martín aparece en esta tesitura como la gran derrotada, pues ha sido el sostén de José Alberto Díaz hasta ahora, y las cosas han cambiado incluso en el PSOE lagunero pese a la “represión” de la dirección regional e incluso la nacional contra Javier Abreu y su compañero Yeray Rodríguez, porque a Martín le ha surgido una fuerte oposición comandada por Silvia Maestre que es totalmente partidaria de la moción de censura. Cabe señalar que Gustavo Matos, que hasta hace poco era partidario de censurar a José Alberto Díaz, en esta ocasión de paso a los abstencionistas. Dicen las malas lenguas que para que Ángel Víctor Torres le siga teniendo en consideración. A lo mejor Matos ha tenido una decisión equivocada.

Pero aparte de impulsar la moción de censura en La Laguna, el PSOE tinerfeño le ha plantado cara a Ángel Víctor Torres en su maniobra de pactar con Fernando Clavijo, y Emilio Fariña. En unas declaraciones al Diario de Avisos ha dejado claro que se oponen rotundamente a un pacto futuro con Coalición Canaria, y que abogan por entendimientos con fuerzas progresistas, en el caso de La Laguna con Si se Puede/Podemos y XTenerife, formaciones que lideran Rubens Ascanio y Santiago Pérez respectivamente. Un cambio de política espectacular que pone a Ángel Víctor Torres en una situación delicada, contra las cuerdas. Me chisman desde Tenerife que en esta ocasión Torres no se atreverá a disolver a la dirección insular de la Isla picuda, como hicieron Francisco Hernández Spínola y Julio Cruz en anteriores ocasiones con la de Santa Cruz e incluso con la Insular, porque la respuesta sería de total contundencia.