Contador avisa que la “etapa más dura” será la del final del Galibier

Sobre los hermanos Schleck: “Tienen que pensar la táctica, ellos saben cuál está mejor y sacrificarse el uno por el otro”

“En los Alpes los puertos son más largos y con mayor altitud, muchos no se sentirán bien”

VALENCE (FRANCIA), 18 (EUROPA PRESS)

El ciclista español Alberto Contador (Saxo Bank-Sungard) resaltó este lunes que habrá que “aprovechar” las tres jornadas en los Alpes para intentar ganar el Tour de Francia, aunque, en su opinión, “la más dura” es la de este jueves con el final en el Galibier.

“La primera etapa del Galibier es la más dura con los últimos diez kilómetros de ascenso al Col d'Agnel. El Galibier es durísimo, el Agnel es impresionante y si se quiere conseguir algo habrá que poner un buen ritmo desde el principio de la etapa”, aseguró Contador en rueda de prensa durante la jornada de descanso.

Además, recalcó que la llegada a Pinerolo “va a depender del clima porque el final es peligroso y puede haber diferencias con mal tiempo”. “Los tres días van a ser importantes, las diferencias son muy grandes y todos van a jugar un papel importante”, añadió.

Sobre Alpe D'Huez, el madrileño sabe que “todo el mundo lo conoce”. “Pero es una etapa corta, con sólo el Galibier antes, habrá que ver las diferencias que se hacen. Hay que aprovechar las tres etapas porque las diferencias en la general son grandes”, advirtió.

Por otro lado, Contador cree que está “a otro nivel” respecto al Giro de Italia. “Hay que ser conscientes de que el Giro no es la mejor preparación para el Tour, se nota a la hora de recuperar, no hay más que ver a los otros, ninguno está para la general”, apuntó.

“No tengo esa frescura del Giro que me permitía ir al ataque. Además, en el Giro había más margen para atacar porque los puertos estaban más juntos, en los Alpes los puertos están muy lejos entre sí y es difícil atacar”, añadió al respecto.

De todas maneras, espera que en los Alpes este “mejor que en los Pirineos”. “El principal problema del Tour han sido las caídas. La rodilla la he tenido muy tocada, y eso hace que no lleves tu pedaleo natural y cambie el estilo. De salida me sigue dando problemas, pero luego mejora. Confío en que voy a estar mejor en los Alpes”, reiteró.

Por ello, el tricampeón del Tour dejó claro que “si hubiera tenido piernas y hubiera estado en buenas condiciones” habría probado a atacar. “Es mi forma de correr y por el ambientazo que había allí, con toda la afición”, confesó.

“En los Alpes los puertos son más largos y con mayor altitud. Muchos no se sentirán bien. Necesitamos atacar y romper la carrera para intentar desbancar a Evans, que cada día que pasa tiene más cerca la victoria”, prosiguió, alabando al líder Thomas Voeckler (Europcar), al que ve en “un estado de forma increíble y que va a ser difícil quitarlo de ahí”.

“A VOECKLER VA COSTAR QUITARLE DE AHÍ”.

En cuanto a los favoritos, el de Pinto volvió a insistir que los hermanos Schleck pueden estar equivocándose en su estrategia. “Cada día que pasa sin saber cuál es su baza para la general se hace más complicado. Parece que queda mucho, pero en dos días estamos en París. Tienen que pensar la táctica, ellos saben cuál está mejor y sacrificarse el uno por el otro, si no, lo tendrán complicado con Evans y con el propio Voeckler, que va a costar quitarle de ahí”, comentó, sin querer responder sobre sus preferencias para un posible ganador “para no crear conflictos”.

Y es que para el madrileño, el maillot amarillo es “un claro candidato a la victoria final” después de pasar los Pirineos “con matrícula de honor”. “En los Alpes, no tendrá problemas en la etapa de Pinerolo y en las otras dos puede perder tiempo, pero tiene mucha ventaja en la general. No sé si es el máximo favorito, pero al menos tiene las mismas posibilidades que Cadel Evans”, avisó.

En este sentido, el del Saxo Bank-Sungard no quiso polemizar sobre el hecho de que Andy Schleck no le situase entre los favoritos. “Sí me considera un rival. Ya me gustaría que cuando atacara no saliera a por mí”, bromeó.

Además, el ciclista español, que cree que ha sido el Tour donde “más tensión ha habido”, tiene claro que con su actual desventaja en la general “será imposible ganar” la carrera en la crono del sábado de Grenoble.

“Tengo una tranquilidad grandísima gracias a la temporada que llevo y todo lo que he logrado este año. Ahora el Tour es un reto, no el más grande de mi carrera, pero sí que tengo ganas de que empiece”, sentenció Contador.

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