El Tenerife se juega el todo o la nada en el Heliodoro

“El partido más importante de la temporada”, según lo calificasen los componentes de la plantilla del Club Deportivo Tenerife. Los blanquiazules se juegan el todo o la nada bajo el calor de su afición ante el Badalona, en el partido de vuelta de la primera eliminatoria de la promoción de ascenso a Segunda División B.

Con el resultado de la ida otorgándoles ventaja gracias al empate a uno logrado por Zazo en los últimos compases del partido de ida, los tinerfeños saldrán al verde del Heliodoro con la vista en la segunda eliminatoria de la dura batalla por alcanzar la categoría de plata. Un empate a cero o una victoria le valdrían a los de Medina para alcanzar tal objetivo gracias al valor doble de los goles fuera.

La principal ventaja con la que contarán los tinerfeños es el empuje de una hinchada que abarrotará el coliseo blanquiazul para ser partícipes de esta importante cita. Estos podrán ser testigos del propósito declarado por la plantilla del cuadro tinerfeño, quienes aseguraban tener muchas ganas de que llegue el día del partido para resarcirse de la imagen mostrada en Badalona. “Después de un partido tan feo y tan malo, lo que tienes ganas es de que comience ya el siguiente encuentro. Y así está la plantilla, con esas ganas de que ruede ya el balón”, afirmó Quique Medina, entrenador de los insulares.

“Nadie ha visto jugar al Badalona como lo hizo en el partido de ida”, apuntó Medina, quien asegura que fue el mejor partido de los catalanes en toda la temporada. “Sabemos como juegan fuera de casa, pero tendremos que esperar a ver si rinden como en el primer envite”, añadió el míster.

En cuanto a los disponibles, David Medina y Raúl Llorente están con molestias, aunque habrá que esperar al mismo domingo para ver si ambos jugadores podrán vestirse de corto para dar este importante paso a por la consecución del gran objetivo. “No tengo dudas en cuanto a la alineación”, aseveró el técnico santacrucero, quien espera que no se produzca ningún contratiempo que le impida plantear lo decidido.