Abogados de la empleada que denunció a Strauss-Kahn suman un cargo por misoginia

NUEVA YORK, 23 (Reuters/EP)

Los abogados de Nafissatou Diallo, la empleada del hotel Sofitel de Nueva York que denunció al ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn por agresión sexual, han añadido a la demanda civil contra el político francés un cargo por misoginia.

En el texto enmendado, los abogados de Diallo aseguran que Strauss-Kahn cometió un “crimen de violencia” contra su cliente “porque es una mujer y, al menos parcialmente, tiene aversión a las mujeres”.

Los abogados de Diallo han acudido a la Ley de Protección a las Víctimas de la Violencia de Género, apenas apelada en los tribunales neoyorquinos, para dotar de más fuerza a la demanda civil contra Strauss-Kahn.

Su objetivo sería presentar como prueba el comportamiento sexual anterior del ex director gerente del FMI, cuyo valor ha sido rechazado por los tribunales neoyorquinos al considerar que carecía de interés para juzgar el caso de Diallo.

“Dado que uno de los elementos de prueba de esta acusación es demostrar que la agresión sexual estaba basada en la discriminación por género, será mucho más fácil presentar otros comportamientos sexuales”, ha dicho Douglas Wigdor, uno de los abogados de Diallo.

Así, Wigdor ha expresado su confianza en que, basándose en este nuevo cargo, la justicia permitirá a los abogados de Diallo investigar el pasado de Strauss-Kahn.

En mayo de 2011, Diallo acusó a Strauss-Kahn de obligarla a practicar sexo oral en su habitación del hotel Sofitel. Tras la denuncia, fue detenido, cuando estaba a punto de volar hacia París, y dimitió como director gerente del FMI.

La demanda penal contra Strauss-Kahn fue desestimada por los tribunales neoyorquinos al considerar que Diallo no era fiable porque había ofrecido diferentes versiones de la agresión sexual y porque comentó con un amigo el dinero que tenía el político francés.

La semana pasada, Strauss-Kahn presentó una demanda contra Diallo por difamación, asegurando que la denuncia de agresión sexual es parte de una estrategia política que ha conseguido apartarle de la carrera por la Presidencia de Francia.

Por otro lado, la justicia francesa investiga la implicación de Strauss-Kahn en una red de prostitución que organizaba fiestas en Washington, París y Lille y en la violación colectiva de una prostituta.

Los abogados franceses del ex director gerente del FMI han rechazado estas acusaciones y han asegurado que su único objetivo es reprobar el comportamiento “libertino” de su cliente.

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