Kenia suspende sus acuerdos para juzgar a piratas en su territorio
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El Gobierno keniano ha dado por terminados los acuerdos internacionales que había suscrito y por los que se comprometía a juzgar en su territorio a los piratas somalíes apresados en aguas del golfo de Adén por los barcos que numerosos países han enviado a la zona para combatir la piratería.
En un comunicado emitido anoche, el Ministerio de Exteriores keniano informa de que a fecha del 30 de septiembre los memorandos de entendimiento se dan por concluidos. Según informa el diario 'Daily Nation', el Gobierno del presidente Mwai Kibaki no ha cedido a la presión de las potencias occidentales para que mantuviera el pacto.
Según el rotativo, la decisión ha sido muy bien recibida por la clase política keniana, que no estaba contenta con los acuerdos y consideraba que los países occidentales no habían cumplido con su parte del trato.
El año pasado, el Gobierno keniano firmó memorandos de entendimiento con Estados Unidos, Reino Unido, la Unión Europea, Dinamarca, Canadá y China, recuerda el diario. En virtud de dichos acuerdos, se comprometía a aceptar a los piratas que apresaran los barcos de estos países, a juzgarlos y a encarcelarlos y a cambio recibiría ayuda para realizar esta labor.
El presidente del comité parlamentario de Defensa y Asuntos Exteriores, Adan Keynan, se felicitó de la decisión del Gobierno. “Detener, perseguir y encarcelar a piratas aquí expone a Kenia a retos muy serios de seguridad”, señaló al 'Daily Nation'. “No va en el interés de Kenia el juzgar a piratas somalíes aquí”, subrayó.
El pasado junio, el citado comité parlamentario había presentado un informe que criticaba la decisión del Gobierno de aceptar a los piratas apresados. “Juzgar y encarcelar a piratas en Mombasa plantea una seria amenaza de seguridad para Kenia”, advertía el documento, en el que se criticaba al Ministerio de Exteriores por haber firmado los memorandos sin atender a la seguridad del país.
Asimismo, el informe ponía de relieve que los juicios de los piratas habían aumentado la carga de los tribunales y los costes, y su presencia en las prisiones había llevado a un “adoctrinamiento” de la población carcelaria local. Por todo ello, recomendaba al Ejecutivo que no aceptara a más piratas y que suspendiera “con efecto inmediato la aplicación” de los acuerdos.
