Zapatero: ''Es opinable afirmar que hay crisis económica en España''
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, señala en una entrevista que publica este domingo El País, que “es opinable” afirmar que hay una crisis económica en España y que “depende de lo que entendamos por crisis”. “Lo que el ciudadano siente es que la economía va peor que hace un año. Es lo que dicen las encuestas, y es razonable porque es verdad. Pero conceptos como recesión, desaceleración o crisis pertenecen más al ámbito académico”, afirma Zapatero.
El jefe del Ejecutivo responde así en una entrevista concedida al diario El País con motivo de los 100 días de gobierno tras las elecciones del 9 de marzo y en la que habla de economía, política y temas sociales.
Precisa sobre la situación económica que “hay un descenso acusado” del crecimiento cuyas causas son, a su juicio, el contexto internacional, el precio del petróleo y los tipos de interés, y que en España “se nota sobre todo en el sector de la construcción”.
Asegura que la economía española va a crecer este año en torno a un 2%, “que es lo que han crecido Francia, Italia y Alemania durante cuatro años. Estamos por primera vez por delante de la media europea”, y agrega que España tiene “un añadido que otros países no tienen, que es el superávit”.
ETA
Sobre la posibilidad de buscar un fin dialogado de la violencia de ETA, Zapatero asegura que “el diálogo se ha demostrado inútil con lo que ETA ha hecho”. “Es un camino que no ha dado los resultados deseados. No va a haber diálogo”.
Zapatero se muestra igual de convencido de que la consulta planteada por el lehendakari Juan José Ibarretxe en el País Vasco “no se va a celebrar”. “Puedo asegurarlo”, sentencia.
“El Gobierno vasco no puede poner urnas, no dispone de urnas ni de administración electoral. Por tanto, esa es una hipótesis que no se va a dar”, añade.
PP
En relación al último congreso del PP dice: “si de verdad hay cambios, yo muestro una humilde satisfacción”, y considera que si se pasa del “España se rompe” al diálogo con los nacionalistas “es bueno”.
Considera que la directiva europea sobre el retorno de inmigrantes es un “avance progresista” ya que si Europa cuenta ahora con “garantías jurisdiccionales para la gestión del retorno y la estancia en los centros de internamiento y antes no”, significa un avance.
“Se puede estar de acuerdo o no, pero lo que no se puede decir es que se criminaliza la inmigración o que se atenta contra los derechos humanos”, afirma.
Zapatero no es partidario de cambiar la relación con la Iglesia católica porque “en las relaciones con la Iglesia tenemos que ir a la Constitución que establece un Estado aconfesional y mandata a los poderes públicos a mantener una relación singular con la Iglesia católica”, porque en España hay una mayoría católica.
Según el jefe del Ejecutivo, “así ha sido durante la democracia y el marco ha funcionado razonablemente. La mejor prueba es que ningún Gobierno lo ha querido cambiar ni anular y, en esto debemos ser respetuosos con lo que se ha producido”.
