El embajador venezolano ve parciales los testigos en la causa ETA-FARC
MADRID, 05 (EUROPA PRESS)
El embajador saliente de Venezuela en España, Isaías Rodríguez, ha desacreditado por parciales a los dos testigos venezolanos --un diplomático y un ex militar-- propuestos por la AVT en la causa que se investiga en la Audiencia Nacional sobre las supuestas relaciones de ETA y las FARC. Rodríguez llega a acusar al ex embajador de Venezuela en ONU Diego Arría de aspirar a la presidencia del país caribeño y se mofa de sus operaciones de cirugía estética.
“A veces no sabemos si estamos hablando del mismo Diego Arría. Se ha hecho tantas cirugías plásticas que uno no sabe si es el mismo Diego Arria del ex presidente Carlos Andrés Pérez”, dice Rodríguez en una entrevista concedida a Europa Press en la que acusa a su compatriota de estar “promovido por los intereses de la oposición al Gobierno de Zapatero y por los intereses de oposición al Gobierno venezolano”.
Recuerda como algo “curioso” que Diego Arría fuese gobernador de Caracas, representante del Gobierno de Carlos Andrés Pérez (1988-1991) “en el momento en que se produce una especie de convenio entre Felipe González y Carlos Andrés Pérez para colocar a miembros de ETA en Venezuela en un avión de las Fuerzas Aéreas españolas”.
Arría prestó el pasado lunes 29 declaración ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ante quien denunció que el Gobierno de Chávez ha acogido en el Ministerio de Agricultura a otros seis etarras además del caso ya conocido del supuesto enlace de la banda en Venezuela, Arturo Cubillas Fontán, sobre el que dijo que actúa con el apoyo de las autoridades chavistas.
“Si hablamos desde el punto de vista judicial Arría no es un testigo que pudiéramos llamar imparcial, objetivo, porque aspira a la candidatura presidencial de Venezuela por la oposición”, censura el embajador al tiempo que acusa a su compatriota de haber “permanecido en Estados Unidos haciendo oposición a los distintos gobiernos de Venezuela, no solamente al del presidente Chávez”.
En sus respuestas también carga contra el segundo testigo, Néstor González, un ex general de las fuerzas armadas de su país que denunció la presencia de campos de entrenamiento de las FARC en territorio venezolano. “Pienso que podría tener un interés evidentemente político”, denuncia Rodríguez sobre este militar que reside en Costa Rica huyendo de la Justicia venezolana al estar acusado de participar en el intento de golpe de Estado contra Chávez en 2002.
“No se si a lo mejor está en una situación penosa desde el punto de vista económico en Costa Rica y a lo mejor pudiera tener otro interés distinto al interés político”, apunta el diplomático quien insiste en que “testigo que se ofrece, no es testigo imparcial”.
“TODO EL MUNDO SABE DÓNDE ESTÁ CUBILLAS”
Al ser preguntado por el paradero de Cubillas --sobre el que pesa una orden de detención internacional-- asegura que “todo el mundo sabe en este momento dónde está Cubillas”.
“Si efectivamente los medios lo tienen bien ubicado, es casi seguro que las informaciones oficiales de nuestro país sepan, no solamente por lo que indirectamente dicen los medios, sino por la preocupación que existe sobre el tema de saber dónde se encuentra Cubillas”, añade Rodríguez, quien sin embargo dice no saber “si se ha recibido o no la solicitud de extradición” al no ser competencia de la embajada.
Defiende que su Gobierno “nunca ha expresado una opinión que se pueda calificar de una u otra manera” acerca del asunto Cubillas, pero recuerda que “en Venezuela existe una norma constitucional mediante la cual los venezolanos no pueden ser extraditados”. Rodríguez además justifica esa norma en el hecho de que “EE.UU solicitaba extradiciones de grandes capos del narcotráfico y luego no les sancionaba”. “Precisamente por eso decidimos que se quedaran en Venezuela para ser sancionados en Venezuela”, remacha.
Isaías Rodríguez abandonará el próximo miércoles su cargo como embajador en España, donde llegó en julio de 2009. Al hacer balance de su gestión defiende que “la colaboración de Venezuela ha sido siempre una colaboración leal”. “El propósito que traíamos era mantener buenas las relaciones bilaterales con España, creo que las hemos mantenido bien”, valora el diplomático quien no obvia haber sorteado “momentos difíciles y bastante complejos”.
En este punto, hace especial mención al PP para acusarle de haber colocado las relaciones con Venezuela “como parte de la agenda electoral y de la agenda interna”. “Había intención de perjudicar, no por parte nuestra, sino por parte de los intereses político partidistas y algunos intereses posiblemente económicos, mediáticos, de que eso produjera alguna ruptura o algún esguince en las relaciones diplomáticas”, denuncia.
