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Santa Cruz engalana de flores sus cruces

La ciudad de Santa Cruz de Tenerife celebra hoy el Concurso de Cruces de Flores Naturales, una competición que involucra a todos los barrios y que recoge una tradición de siglos que además sirve de conmemoración de la fundación de la ciudad por el adelantado Alonso Fernández de Lugo hace ahora 519 años. El 1 de mayo de 1494, Fernández de Lugo desembarcó en la costa de Añazo, como denominaban al lugar los guanches, pero no fue hasta el 3 de mayo cuando se celebró la misa de exaltación de la cruz.

Aquella cruz se supone que es la que sigue en la Iglesia de la Concepción, erigida junto al real que dio origen a lo que con el tiempo sería la capital tinerfeña, según explicó a Efe el periodista Zenaido Hernández, experto y gran conocedor de las tradiciones canarias.

Una vez culminada la conquista de Tenerife, emigrantes peninsulares comenzaron a establecerse en la isla a partir del siglo XVI, muchos de ellos procedentes de Andalucía, de donde trajeron la tradición de adornar las cruces con flores en el mes de mayo. De hecho, la costumbre de engalanar con flores las cruces está extendida por muchas localidades de la isla, no sólo en Santa Cruz de Tenerife, pero en esta ciudad además coincide con el aniversario de su fundación.

La veneración por la cruz llegó al punto de que en el siglo XVIII orfebres como los Fernández Trujillo, de La Laguna, la cubrieron de plata repujada con motivo del tercer centenario de la fundación de Santa Cruz de Tenerife.

El 3 de mayo “siempre ha sido un día solemne” para la ciudad y la costumbre de engalanar las cruces con flores estaba extendida entre las familias, explica Zenaido Hernández.

A partir de los años cincuenta del siglo XX el Ayuntamiento decidió celebrar anualmente concurso de cruces de flores naturales, lo que ha conseguido potenciar el arte floral, favorecido por la participación y la competencia entre barrios, clubes y asociaciones.

Un día como hoy, las cruces de flores se extienden por todos los barrios de la ciudad y su espectacularidad y colorido asombran a vecinos y visitantes.

La dispersión de las cruces por la ciudad obliga al jurado del concurso a emplear todo el día en conocerlas y valorarlas, algo que hacen con especial cuidado porque hay un gran espíritu de competición y “se despiertan las pasiones”, explica Zenaido Hernández.

En esta ocasión, participan 34 cruces de flores elaboradas por asociaciones y comunidades de vecinos, sociedades y entidades de la capital tinerfeña.

Además de este concurso, la tradición manda que en el céntrico parque García Sanabria se celebre la exposición de flores y plantas.

Santa Cruz de Tenerife ha empezado a conmemorar su fundación desde la noche del 2 de mayo con el tradicional baile de magos, en el que miles de vecinos ataviados con el tradicional traje campesino han bailado al son del folclore de las islas.

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