El barco de emergencias que terminó atracado en la montaña
Fue comprada por el Gobierno de Canarias para labores de salvamento marítimo pero ha acabado varada en medio de la montaña. Ese ha sido el triste destino de la Calderón de Canarias, una embarcación de “intervención rápida” que actualmente se deteriora al aire libre, en la trasera de la sede de Seguridad y Emergencias, en La Laguna.
La embarcación, de aluminio, 12 metros de eslora y dos motores diesel, fue adquirida hace 12 años, pero está parada desde hace al menos ocho, y fue desechada definitivamente cuando en 2007 el Grupo de Emergencias y Seguridad (GES) sustituyó al Grupo de Intervención de Emergencias (GIE). Así, la Calderón, que estuvo un tiempo parada en Puerto Colón (Adeje), fue llevada a tierra para ser finalmente “atracada” en medio de una frondosa vegetación, a menos de un kilómetro del aeropuerto de Los Rodeos.
La matrícula de la embarcación es visible, 8ª GI-8-1-98. GI corresponde a Gijón y 98 es el año en que fue construida en astilleros asturianos. El Gobierno de Canarias adquirió otros tres modelos iguales, bautizados como Morrocoyo, Delfín Mular y Foca Monje, y cada uno costó 22 de millones de pesetas (132.222 euros).
Fuentes de la Dirección General de Seguridad y Emergencias explicaron a CANARIAS AHORA que una de las embarcaciones, la Delfín Mular, fue destinada al servicio de Emergencias de Lanzarote (es la única en activo), otra permanece atracada en el puerto de Las Palmas, sin actividad, otra fue donada a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y la cuarta, la de la montaña, “va a ser subastada”, aunque no se ha fijado la fecha.
Pese a ser de intervención rápida, eran excesivamente lentas
Entre 1999 y el año 2000, la Viceconsejería de Medio Ambiente adquirió estos barcos a la empresa Auxiliar del Principado de Asturias para funciones de “salvamento marítimo, la vigilancia para la conservación de especies protegidas y el control e inspección de vertidos al mar”, según se recoge en la web www.loquepasaentenerife.com
Cuando la Consejería de Presidencia y Justicia creó en el año 2000 el GIE, los cuatro barcos fueron traspasados al nuevo organismo. Se pintaron de amarillo con los indicativos “GIE Emergencias” en rojo. En teoría eran embarcaciones idóneas “por su tamaño reducido, poco calado y buena maniobrabilidad”, pero en la práctica no resultaron tan útiles porque, pese a ser de intervención rápida eran excesivamente lentas.
En 2005, el ex delegado del Gobierno José Segura Clavell pensó en la Calderón de Canarias y sus compañeras para crear un servicio de Guardacostas canario al que destinar el grueso de la Policía Canaria, pero la idea no cuajó, y en 2009 el PSOE presentó ante el Parlamento de Canarias una proposición no de ley para que estas barcas “paradas desde hace cinco años en diversos puntos de las islas” se pusiesen de nuevo en servicio.
La respuesta de la diputada de Coalición Canaria, Lidia Esther Padilla Perdomo fue que la única embarcación parada era la Calderón, porque estaba siendo reparada en Las Palmas. No se sabe si esa reparación se llevó a efecto no. Lo que está claro es que no sirvió de mucho.
