(((voy a preparar un mapita (txema)))A Canarias se llega desde Mauritania
Mauritania, después de un brutal golpe de Estado en agosto de 2008 y sin control alguno de sus aguas desde entonces, se ha consolidado en 2009 como el principal y casi único puerto de salida de inmigrantes subsaharianos hacia Canarias. De las 36 embarcaciones que lograron arribar a alguna costa del Archipiélago entre enero y el 17 de septiembre, 27 partieron de Mauritania (la mayoría de Nouadhibou); dos lo hicieron desde Marruecos; una desde el Sahara, y hay seis que oficialmente figuran con un puerto de partida “desconocido”.
Son datos oficiales sobre inmigración por mar obtenidos de un informe de las Fuerzas de Seguridad del Estado. En ese documento al que ha tenido acceso CANARIAS AHORA se especifica cada puerto de partida de las embarcaciones y el número de inmigrantes clandestinos que portaba, número de menores y de fallecidos.
En esa contabilidad oficial no se distingue entre cayucos y pateras, pero de las seis barcazas con punto de partida ignorado al menos tres posiblemente partieron de Marruecos o Sahara, ya que llegaron a Tinajo, Teguise y Tías, en la cercana Lanzarote.
La que alcanzó Tinajo lo hizo el 5 de enero pasado con nueve adultos, todos varones, a bordo. La de Tías arribó con 10 personas el 31 de agosto. Entre medias queda otra patera que no se sabe de dónde salió pero que se hizo añicos a pocos metros de la costa de Teguise y aún nos retumba. Llevaba 32 inmigrantes a bordo de los que 25 se ahogaron y todavía falta un desaparecido.
Muertos con ficha oficial
El informe incluye los datos de todos los inmigrantes fallecidos contabilizados hasta ahora en aguas canarias. Son 33 personas. Hombres, mujeres y algunos niños de los que se ha podido certificar su muerte, bien porque llegaron ya cadáveres a bordo, bien porque no aguantaron más y murieron en un hospital o camino de él.
Los primeros cuerpos sin vida llegaron en cayuco a Mogán el 3 de febrero pasado. En la barca viajaban 77 personas que aguantaron una travesía de al menos diez días. Sobrevivieron 70 adultos y cuatro menores. Murieron tres personas.
El siguiente registro necrológico es el de esa madrugada del 15 de febrero en la costa de Teguise. A veinte metros escasos de la playa, cuando creían que habían tocado tierra porque chocaron con una piedra, las 32 personas que llevaba esa patera saltaron al mar y la mayoría no supo salir a flote. Dos surfistas, Christian Hunt y Jonhy Camarasa, lograron salvar la vida de seis pasajeros. Los demás se hundieron “como piedras”, según un testigo. Murieron 15 menores y 11 adultos, entre ellos una embarazada. Para más colmo, un radar del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) no detectó la embarcación por una mínima distancia de centímetros.
Una nueva tragedia quedó registrada el 12 de julio en Valverde. Un cayuco con 68 inmigrantes, entre ellos 14 menores, llegó al puerto herreño con tres cadáveres a bordo. Los supervivientes relataron a los médicos y voluntarios de Cruz Roja que tuvieron arrojar otros cuerpos al mar y que habían partido de Mauritania nueve días antes.
La última víctima se embarcó de Dakhla (Sahara), no se sabe en qué fecha. Lo que sí se sabe es que viajaba en una patera que por fuerza se tuvo que perder en el mar porque a Tenerife no llegan pateras, sino cayucos. La barquilla encalló literalmente en una playita de Granadilla de Abona el 31 de agosto. Ese inmigrante magrebí no pudo aguantar una travesía que Cruz Roja estimó de al menos cuatro días o cinco días. Sus otros cuatro compañeros de viaje, sobrevivieron.
Cambio de origen
En total, han llegado a Canarias en lo que va de año 2.149 inmigrantes por mar, 327 en el mes de septiembre, de los que 95 (incluidos dos menores) lo han hecho a Las Palmas y 234, a Tenerife. En esa cifra están sumados dos presuntos patrones y 24 menores.
No son tanto estas cifras lo que llama la atención del informe como la procedencia de los inmigrantes. Algo ha cambiado. Los senegaleses, que en 2006 ocuparon 1,7 plazas de cuantas había en los cayucos (16.327 senegaleses de un total de 31.859 subsaharianos que viajaron en 588 barcas), en el mes de septiembre pasado, por poner un ejemplo, fueron sólo 16 los nacionales de ese país que entraron en Canarias por puerto fronterizo no autorizado.
Pese a que la mayoría de las embarcaciones que llegan a Canarias parten de Mauritania, apenas viajan en ellas mauritanos, sólo 4 de los más de 300 inmigrantes rescatados. Sin embargo, son cada vez más los ciudadanos de Guinea Conakry y de Mali que intentan salir de sus países. 93 guineanos y 88 malineses han escapado a Canarias en los últimos 30 días.
