España coopera con Senegal para la repatriación de 300 inmigrantes
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, dijo hoy que el Ejecutivo está cumpliendo con la obligación de cooperar en “acciones diplomáticas” para que los inmigrantes irregulares vuelvan a donde salieron, en relación con un buque interceptado por Frontex en aguas de Senegal.
Según precisaron fuentes del Ejecutivo, las gestiones diplomáticas se mantienen con Senegal, con Guinea Conakry porque de allí “salió el barco”, y con la propia Unión Europea. “Estamos haciendo gestiones diplomáticas de todo tipo, como hacemos siempre, con los países que están afectados en estos momentos por la ruta del barco”, explicó Fernández de la Vega al ser preguntada por esta cuestión en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros.
“El Gobierno está cumpliendo -precisó- con la obligación que en estos momentos es del Gobierno, que es cooperar en acciones diplomáticas con los distintos países, cooperar a los efectos de que se cumplan las normas de que los inmigrantes irregulares vuelvan al punto de origen de donde salieron”. El buque de bandera norcoreana Happy Day con cerca de 300 inmigrantes clandestinos de India y Pakistán a bordo fue interceptado el jueves por la tarde a unas 80 millas de la costa de Dakar (Senegal) por la patrullera italiana Dáttilo, perteneciente a la agencia europea de fronteras (Frontex), según informó este viernes la embajada de Italia en España.
Por su parte, el director adjunto de Frontex, Gil Arias, explicó que España está liderando las negociaciones con Senegal para que acepte el desembarco de los 300 inmigrantes. España fue el país que solicitó esta operación y Frontex intervenó en su coordinación, por lo que la diplomacia española es la encargada de negociar el destino de los inmigrantes y, si fuera necesario, convencer a Senegal de que debe cumplir con los acuerdos suscritos.
“La responsabilidad es de Senegal porque el barco ha sido interceptado en aguas senegalesas, y Senegal, en ese acuerdo que tiene suscrito con España, se compromete a aceptar los inmigrantes que se intercepten en sus aguas, durante estas operaciones”. Si este país no lo entendiera así, “la diplomacia española y la europea en general tendrán que buscar una solución para estos inmigrantes, para ver dónde se les acoge”, como en el caso de los inmigrantes que rescató un pesquero español en aguas de Malta, “que fueron repartidos por varios países”.
“Demostración más de la estrecha colaboración”
Según explicó este viernes en una nota la embajada italiana en España, la operación se llevó a cabo gracias a la actividad de inteligencia de la Marina Italiana en conjunto con las de “países amigos”, y en la cual han participado, entre otros, dos oficiales senegaleses. La embajada informa de que seis integrantes de la tripulación fueron detenidos, y que, de momento, permanecen en el interior del mismo buque.
La operación, subraya el comunicado, es “una demostración más, de la estrecha colaboración” alcanzada entre las fuerzas de los países que integran Frontex, “y, en particular, entre España e Italia, en la prevención a la inmigración clandestina”. Italia recuerda que es el único país que contribuye con una patrullera y un avión de vigilancia costera ATR 42 a Frontex Hera 2007, para el control de las costas senegalesas.
Ya antes de la operación del jueves, añade la nota, el Gobierno italiano había decidido que a partir del próximo 12 de abril, fecha en que el Dáttilo volverá a Italia, otra patrullera, la Fiorillo, haga el servicio en su lugar.
Denuncia de cuatro inmigrantes
Según un oficial de la Marina senegalesa que pidió el anonimato, la embarcación, que tenía como destino las islas Canarias, fue interceptada este jueves fuera de las aguas territoriales de Senegal por una patrullera de la operación de la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex). “Estamos aún esperando más informaciones con respecto al desarrollo de la operación que está llevando a cabo la Marina senegalesa”, dijo la misma fuente, que evitó facilitar más datos.
La semana pasada, la prensa anunció la salida de una embarcación desde la ciudad norteña de Saint-Louis con destino al Archipiélago canario, con 160 personas a bordo. Varias personas que querían embarcar y que llegaron tarde denunciaron a la Policía a los cuatro pasadores que han sido detenidos, salvo uno que logró burlar la vigilancia de los servicios de seguridad.
Tras varios meses de tregua impuesta por las malas condiciones climáticas, se teme una reanudación de las salidas masivas hacia el archipiélago canario, como fue el caso del año pasado, cuando se calcula que viajaron allí unas 25.000 personas. La prensa matutina de Senegal da cuenta este viernes de la detención por la Policía, este jueves, en Rufisque, localidad ubicada a 26 kilómetros de Dakar, de un grupo de 25 jóvenes y los pasadores que ultimaban los preparativos para emprender un viaje hacia Canarias.
Repatriados más de un centenar de ocupantes del 'Marine I'
Por otro lado, otros 115 pakistaníes procedentes del buque Marine I serán repatriados en los próximos días, con lo que sólo quedarían 31 inmigrantes en el puerto mauritano de Nuadibú, informaron fuentes diplomáticas.
Las mismas fuentes precisaron que la salida de este nuevo grupo de pakistaníes tendrá lugar antes del próximo 28 de marzo desde Nuakchot, la capital de Mauritania, y precisaron que todos se han acogido a la repatriación voluntaria, al igual que otros 24 que fueron repatriados hace diez días. Una vez producida esta nueva repatriación, quedarían en el puerto de Nuadibú un grupo de 31 inmigrantes que, o están pendientes de obtener su documentación, o se resisten a ser identificados.
Por su parte, fuentes de Cruz Roja Española cifraron en 138 el número de inmigrantes que permanecen en Nuadibú y explicaron que tres de sus miembros y otros 15 de la Media Luna Roja se ocupan desde el pasado 13 de febrero de la asistencia alimentaria e higiénica de las 368 personas desembarcadas del Marine I. En este tiempo, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha coordinado la repatriación voluntaria de 230 personas.
El Marine I, que se había averiado el 4 de febrero en aguas internacionales cuando se dirigía a las Islas Canarias, fue descubierto por un avión de reconocimiento español, que había alertado al Centro de Control Nacional de Salvamento en Senegal.
