Rescatar del olvido los riscos de Las Palmas de Gran Canaria tras el fiasco de la Capital Europea de la Cultura

Risco de San Antonio

Iago Otero Paz

Las Palmas de Gran Canaria —

Cuando Las Palmas de Gran Canaria aspiraba a ser la Capital Europea de la Cultura en el ya pasado año 2016, uno de los platos fuertes de la candidatura Ciudad-Isla del color. Una luz en el océano era el potenciar los riscos de la capital, cinco pintorescos rincones compuestos por San Nicolás, San Juan, San Roque, San Antonio y San Francisco al que la ciudad le ha dado históricamente la espalda. Por aquella época, 2011, la capital grancanaria peleaba con Burgos, Segovia, Zaragoza, Córdoba y San Sebastián por acompañar a la polaca Breslavia, pero finalmente el jurado se decantó por la ciudad vasca gracias a una propuesta de rebeldía cívica contra la violencia meses antes de que ETA anunciara el cese definitivo de su actividad armada.

Las crónicas de hace ya más de un lustro rememoran la histórica visita de los miembros del jurado a San Nicolás, donde se les agasajó, entre otras cosas, con una parranda y gastronomía típica de las Islas, muestra importante de la cultura tradicional canaria. Una de las seis líneas temáticas versaba bajo el título Engánchate al Risco que buscaba recuperar y generar espacios de la ciudad para el uso cultural, intervenciones temporales, la celebración de eventos en localizaciones no convencionales o la dinamización de los espacios con rutas culturales y medioambientales y que centraba casi todas las actuaciones en los riscos palmenses en los que querían potenciar la participación ciudadana y el arraigo de sus residentes.

Muchos de los proyectos que se recogían en el dossier de preselección a la candidatura no se pudieron realizar, pero ahora el Ayuntamiento tiene concebidas algunas iniciativas que en parte ya se querían implantar para 2016. Como explica el concejal de Urbanismo de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste, la idea es ir embelleciendo los barrios con prudencia para evitar la especulación ya que el objetivo principal es evitar la pérdida de su carácter de población popular. “Desde que intervengas se revalorizan por lo que la población original es desplazada por una clase media con poder adquisitivo”, por ello, buscan ir actuando despacio en un barrio que reconoce que tiene potencialidad desde el punto de vista turístico como una forma de vida o de entender la ciudad como era. Así, quieren hacer los riscos más accesible para los visitantes, pero sobre todo para unos residentes cada vez más ancianos que tienen que hacer frente a casas en cuesta y de varias plantas y uno de los planes sería, por ejemplo, instalar un ascensor panorámico en San Nicolás que facilite el acceso peatonal a la zona.

Para luchar contra el éxodo de la gente joven el concejal comenta que lo que pretenden desde el Consistorio es que sean los propios vecinos quienes lleven las tareas de embellecimiento y “que las dinámicas de regeneración del barrio surjan de los propios barrios y que no se llegue en plan misionero a arreglar, que sea al revés”, recalca. Esta implicación directa de los ciudadanos se realizará a través de una escuela taller de rehabilitación de fachadas que permitan revalorizar y hacer visitables estas casas del siglo XIX de arquitectura popular, pero también contando con sus opiniones para la toma de decisiones, algo que ya ha ocurrido en la proyección de un parque infantil en la parte baja de San Nicolás que fue diseñado con la participación de los niños del barrio.

Doreste avanza que en estos momentos existen conversaciones con la Consejería de Industria del Cabildo de Gran Canaria para que tanto la Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria (Fedac) y entidades como Moda Cálida creen pequeños talleres de costura y artesanía para revalorizar el barrio desde el punto de vista turístico. También está diseñado, como se recogía en la candidatura, la creación de miradores aprovechando la situación privilegiada de estos rincones. En primer lugar existe el planteamiento, con financiación proveniente del Fondo de Desarrollo de Canarias, de crear un corredor-mirador entre el castillo de Mata y el de San Francisco, pero el concejal añade que no sería el único ya que en estos momentos se está terminando de redactar un proyecto de restauración de las abandonadas Baterías de San Juan para hacer un mirador que sirva como pretexto para rehabilitar el barrio de San Juan. A esta parte se accedería en principio a través de una red de caminos y senderos ciclables, pero también sería necesaria la creación de una carretera para el acceso de guaguas, “si eso lo generas como ruta puedes generar economía en las zonas para pequeños negocios”, sostiene el también primer teniente de alcalde de la ciudad más importante de Canarias.

Fondos EDUSI

Cuestionado sobre cómo se financiarán todas estas tareas, Doreste apunta que excepto San Nicolás y San Antonio el resto de riscos al estar dentro del Cono Sur pueden beneficiarse de los 15 millones de euros provenientes de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (EDUSI) que la Unión Europea le otorgó el pasado mes de octubre y que vigila porque el dinero se dedique a tareas con componente social y laboral de recuperación de las personas y generación de empleo. No obstante, aparte de los fondos provenientes de Europa, Urbanismo tiene fondos propios.

Doreste aclara que la mayoría de los proyectos estarán redactados en el primer semestre de 2017 y alguno de los convenios con las entidades ya estarán firmadas para esta fecha, por lo que espera que en este año ya estén en marcha todos estos proyectos.

El concejal de Urbanismo hace hincapié en el hecho de que con estas actuaciones se busca regenerar social y urbanísticamente los barrios para así dejar de estigmatizar a sus vecinos. “El principal problema de los barrios marginales no es la drogadicción sino el paro, no se puede admitir la estigmatización”, sentencia y agrega que generando espacios en estos rincones de la ciudad ya se evita el éxodo de los vecinos, mientras que con la escuela taller se da formación y empleo. “Son proyectos que buscan que las personas del barrio sean quienes arreglen su barrio”, concluye.

Mira la fotogalería de los riscos de Las Palmas de Gran Canaria en este enlace.en este enlace.

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