Tomar vino por copas sin descorchar la botella
Ya es posible tomar vino por copas sin descorchar la botella. El invento se llama Coravin y desde este mes lo distribuye en las islas Canarias Bodegas Torres. El revolucionario sistema no es barato, cuesta alrededor de 300 euros, por lo que está especialmente pensado para los exquisitos bebedores de vino que quieren degustar una o dos copas de una botella de alta gama sin que el resto del caldo se estropee.
El invento, de origen estadounidense, funciona a la perfección. Básicamente consiste en la perforación del corcho mediante una aguja que actúa acompañada de gas argón, que va cubriendo las posibles zonas de oxigeno que pudieran generarse alrededor de la operación y sella luego el pequeño orificio que se produce.
También las cápsulas de este gas noble tienen un precio elevado, 20 euros el par, y está testado que pueden servir cada una para unas quince operaciones.
Tras el servicio, el corcho apenas presenta una leve gota de vino en su exterior mientras que la botella y su contenido quedan en perfecto estado de conservación. Cierto es que Coravin no debe utilizarse con corchos que no sean naturales, lo que reafirma su idoneidad exclusivamente para caldos de calidad en su contenido y en su embotellado.
Los vinos que quedan en la botella pueden conservarse tras la perforación de su corcho y el servicio por copas hasta cuatro y cinco meses, siempre que el envase se almacene tumbado.
