El 75% de los jóvenes canarios discapacitados en paro nunca trabajó

Efe

Madrid —

El 75% de los jóvenes discapacitados canarios de menos de 25 años que están paro aún no ha tenido su primera experiencia laboral debido, sobre todo, a los prejuicios asentados en el seno empresarial y la sobreprotección familiar, una cifra que supera la media nacional (69%).

Estas son algunas de las conclusiones de un estudio elaborado por la Fundación Adecco y la empresa Terminales Canarios mediante una encuesta realizada a 400 jóvenes con discapacidad residentes en España -122 de ellos canarios-, y que también desvela que el 62,4% de este colectivo está desempleado.

La crisis económica, recuerdan los expertos, ha disparado la tasa de paro de los jóvenes españoles menores de 25 años hasta el 55%, frente al 26% del conjunto de la población. En el caso de Canarias, la tasa de paro juvenil asciende al 62,1%.

Pero, si además de ser joven se tiene una discapacidad, la discriminación es doble ya que a las dificultades derivadas de su inexperiencia laboral, se añaden prejuicios y estereotipos.

Entre estos, el informe destaca la creencia de algunas empresas de que los trabajadores con discapacidad requieren elevados costes de adaptación y que incrementar el absentismo.

Otro de los problemas radica en las propias personas discapacitadas que suelen tener baja autoestima y motivación, así como escasa confianza en sus posibilidades de encontrar unempleo.

Una situación a que se añade la sobreprotección familiar, que muchas veces se convierte en un obstáculo para que la persona alcance autonomía e independencia.

Tasa de actividad del 36%

Ello explica, según el informe, la menor tasa de actividad de este colectivo (36,2%) frente al del conjunto del país (60%).

Según el 60% de los encuestados, ser joven es un obstáculo añadido para encontrar empleo, mientras que el 63% opina que tener discapacidad es una dificultad añadida.

Frente a ellos, un 10% cree que tener certificado de discapacidad le beneficia a la hora de acceder al mercado laboral.

La crisis económica ha situado en 23 años la edad media en la que los jóvenes españoles se incorporan al mercado laboral frente a los 19 con los que lo hacían en 2005.

Respecto a la estructura familiar de los jóvenes con discapacidad que viven en España, el informe refleja que el 72,5% vive con sus padres, cifra que se eleva al 90% en el caso de los menores de 25 años y disminuye hasta el 64% entre los 26 y los 30 años.

Esta última cifra es más de 10 puntos porcentuales superior a la de los jóvenes sin discapacidad que, según varios estudios, se sitúa en el 53,2%.

El principal motivo que alegan los encuestados para no haberse independizado es el económico (70%), mientras que el 18% no lo ha hecho por motivos de dependencia o accesibilidad.

Además, según el Informe Universidad y Discapacidad del Cermi, los universitarios con discapacidad sólo representan el 1,1% de los matriculados y actualmente suponen algo más de 19.000.

La principal causa es la existencia de barreras que dificultan el correcto desarrollo de los universitarios con discapacidad, principalmente, según los propios estudiantes, un equipo humano no sensibilizado o acostumbrado a tratar con personas con discapacidad, así como la falta de adaptaciones en las aulas o la inexistencia de un departamento específico de atención a este colectivo.

Respecto a la movilidad geográfica, casi la mitad de los encuestados estaría dispuesto a emigrar, mientras que un 65% estaría dispuesto a emprender para conseguir un empleo.

Otra de las conclusiones del informe es que el 68 % de los jóvenes con discapacidad tiene un empleo no relacionado con los estudios que ha cursado.

Respecto a la jornada laboral, la de tiempo parcial es la predominante entre los jóvenes con discapacidad, lo que hace que un 50% perciba una retribución máxima de 6.000 euros al año, seguidos del 20 % que cobra entre 7.000 y 10.000 euros.

Etiquetas
stats