Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Cosas de don Guillermo

Como no podía ser de otro modo, la orden de cierre del Club de Campo El Cortijo, en Telde, tiene todos los ingredientes surrealistas que adornan todo lo que pasa en esa ciudad desde un año y pico a esta parte. Es cierto que las canchas de tenis, la hípica, el salón de celebraciones y el restaurante carecen de licencia de apertura, pero más cierto es que los propietarios, una sociedad con cientos de accionistas, la solicitaron en 2001 y la volvieron a solicitar en 2002 sin que haya habido respuesta alguna. Bueno, por lo que tenemos entendido, los funcionarios no saben qué hacer con las tasas a cobrar porque hay por medio un campo de golf y en la tablilla que tienen no les figura, oiga. La orden de cierre, dicho sea por aclararlo todo, ha sido obedecida por la propiedad, excepto la del restaurante porque consideran que es un servicio privado de los socios que no precisa apertura.

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