Don José, con el honor trastocado

Es una pena que todavía no se haya constituido la República Federal Canaria, esa que preconiza desde su mecedora don Antonio Cubillo y que aventa desde las páginas de El Día su editor-director, don José Rodríguez Ramírez. Porque de haber sido así, posiblemente hubiera sido un tagoror convenientemente constituido por canarios auténticos quien juzgara al periodista Carlos E. Rodríguez, que un día osó contar en el Diario de Avisos cómo fue aquel episodio en que don Pepito trató de vender el periódico a Antonio Asensio. El cuento le costó a Carlos E. Rodríguez una demanda civil de protección del honor, que el director-editor perdió en primera instancia entre las carcajadas de la sala y el azoramiento de su propio abogado, al escuchar los alegatos del ofendido demandante. La Audiencia Provincial acaba de ratificar la sentencia de inadmisión de la demanda y ha condenado a don José al pago de las costas judiciales. Imagínense el cabreo.