Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Perpetuarla en su hijo

Sí, Bravo de Laguna es tan anacrónico como lo son los actos cívicos-militares de la festividad de Nuestra Señora del Pino, empezando por los desfiles y terminando por el imbécil uso del chaqué. Representa la vieja política, que ahora quiere perpetuar sin cambiarle ni un atributo en la figura de su hijo, Lucas Bravo de Laguna, un jovencito que también promete más de lo mismo, vivir de la política. Políticos que solo resuelven los problemas de los poderosos mientras maniobran cada día para asirse un poco más a la poltrona, para llegar a los últimos seis meses de mandato y procurar entonces que los que se beneficiaron de sus favores los devuelvan en forma de generosas aportaciones al partido para volver a repetir las mismas machangadas otros cuatro años más. Por el camino, una vez comprobado que todo está permitido y que se les premia con más votos, vale comprar el favor de dos consejeros que garanticen la mayoría, y por si alguno de los dos tiene un rapto de honradez y flaquea, se compra a la posible suplente con un carguito y garantizada la permanencia. Acto seguido, barra libre para los amigos. Miren al Estadio Insular, miren al Estadio de Gran Canaria, repasen con qué grandes proyectos quiere pasar a la historia el actual presidente del Cabildo: una bandera, un pabellón, el manto de una virgen, un pelotazo en Ciudad Jardín, unas gradas ortopédicas? Y se acabó. Ah, no, y recortarle a la gente sus derechos, reducir los gastos sociales, endeudar a la institución irresponsablemente, aislar a los desafectos y hacer nepotismo sin disimulo, que para eso estamos cuatro años de mamadera.

Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Etiquetas
stats