Teoría de Larry

Dando por hecha la falta de firmeza de la sentencia, la primera persona que se nos viene a la mente no es Mauricio, ni Soria, la otra pata del tándem, sino Luis Larry Álvarez, inspiración, musa, divinidad... que acuñó el otro día una teoría que nos ha dejado francamente marcados. Tras el auto de la Sala de lo Contencioso negando la paralización cautelar del concurso ilegal del istmo, el muy Larry salió diciendo que debía dimitir Segura, que sólo se dedicó a transmitir las órdenes del Ministerio de Fomento, que a su vez trasladaba las de Bruselas, donde no se andan con chiquitas. Vista la sentencia sobre la demanda de Mauricio se nos ocurren muchas maldades en aplicación de las muy pintorescas y extravagantes teorías de Larry. Pero es que, encima, le ha salido un auto del Juzgado de lo Contencioso número 4 negándole a su señorito Soria unas medidas cautelares sobre Arinaga. ¿Quién debe dimitir, Luisito? Que dimita Di Stéfano, por ejemplo. O Felipe González, o ¿qué tal el alcalde de Moya?