También amenaza

Cunde el nerviosismo de un modo que ustedes no se pueden ni imaginar en las filas del PP más cercanas al presidente del Cabildo y del partido en Canarias, José Manuel Soria. Viejos cachorros llamados en otro tiempo a ser el gran relevo generacional, se derrumban por las esquinas, lamentan haberle conocido y vaticinan un futuro inmediato más que negro. Algunos, contagiados por el hasta ahora imperante dale a tu cuerpo alegría, Macarena, se comen las uñas como el líder temiendo que algunas de sus empresas pudieran estar siendo investigadas por cualquiera de los delitos de moda. Los más precavidos hacen sus números a ver cómo será la hipoteca después de 2007. Carlos Sánchez, al que el miedo no le es ajeno en estos momentos, prefiere transmitir de puertas afuera una sensación de fiereza que no le sirve sin embargo para ocultar la mayor: a una concejala de CC en Santa Brígida, Victoria Casas, la amenazó este jueves con ponerla ante los tribunales si sigue diciendo de él lo que anda diciendo. Y lo que cuenta Casas no es otra cosa que lo que ya contó Carmelo Vega, ex alcalde de Santa Brígida y pater amantísimo de Sánchez, en la tele de Suárez de Tangil. Ha dicho Vega, expulsado del PP, que el consejero insular tiene su casa mordiendo suelo público, además de otras lindezas que ya tiene el Fiscal en su poder.