¿Lo consiguió en Tenerife?

Anda don Paulino muy tocado porque no consigue convencer a nadie de que la crisis de Gran Canaria (y a la postre la de Lanzarote) es un problema de “personalismos”. Se debe referir a Román Rodríguez y a los suyos que, que nosotros sepamos, siguen empeñados sólo en una cosa: que se cumplan los acuerdos de febrero, que se atraviesan una barbaridad. Los nervios, mientras llega una solución a la crisis, afloran cada día con más descaro, lo que debe haber motivado que el presidente de CC tuviera un rapto de sinceridad el viernes, en la permanente de su partido, cuando afirmó que, además de los personalismos, la prensa canariona está haciéndole la puñeta. Para añadir a continuación que ese problema concreto lo solucionaría él solito con 30 o 40 kilos si no fuera porque “me lo impide mi honorabilidad” (sic). No sabemos si los billetes serían pagaderos en coleccionables o directamente sobre la mesa, en un maletín. Ni sabemos si igual fórmula fue aplicada con éxito antes de las elecciones en Tenerife, más que nada porque algo se oyó, se vió y se olió. O justo lo contrario.