El cura de La Garita vuelve a pasarse

España se dispone a regular, como Dios manda, las programaciones de las televisiones, más que nada para que los niños no se tengan que tragar la basura que los mayores deglutimos con tanta facilidad. Quedará, cuando se consiga, regular la radiobasura, de la que hay sonoros ejemplos en Gran Canaria para pedir esa regulación por clamor popular. En una de esas radios basura, concretamente en una situada en Telde de muy desventurado recuerdo, el cura de La Garita, Paco Bello, volvió a hacer méritos para que el Obispado le aplique de una vez un severo correctivo. En esta ocasión no le tocó a un cargo de Ican, donde están sus musas, sino el presidente del PSC, Jerónimo Saavedra, al que Bello imitó de modo soez, irrespetuoso, maleducado, intolerante, homófobo y cuasi delictivo. El cura es profesor de religión en el instituto Profesor Juan Pulido Castro, de Arnao, y hasta ahora no tenemos noticia de que la Iglesia, tan movilizada últimamente por las reformas educativas socialistas, haya abierto expediente para que los chicos no sufran a docente tan indecente.