Pero ¿no huían de las cuotas?

Felicitamos efusivamente a Pepa Luzardo y a Cristina Tavío por haber logrado mantenerse (la primera) y ascender (la segunda) al más amplio órgano directivo del PP. Lo están por la cuota territorial, razón que destacamos sin acritud, pero las cosas son como son y no como a todos nos gustaría que fueran. Si fuera sólo por valía -cualidad que no negamos en ninguna de ellas- se habría mantenido Pablo Matos, autor incluso de una ponencia. Lo están por cuota, insistimos, y añadimos incluso que por cuota de mujer, dado el gusto que todos los partidos han cogido a la discriminación positiva, lo que debe congratularnos a todos. Menos a los afectados, claro. De Soria, ¿qué decir? Que ahí sigue porque es presidente del PP canario, pero dado el poco cariño que despierta en Génova y lo que se le avecina, casi estamos por apostar a que es su última presencia. Por cierto, qué oportuno fotógrafo el del periódico amigo, que lo retrató mirando a cámara, casi como un robado.