Un paje real

La reunión de la que les hablamos fue muy grabada por tierra, mar y aire, por lo que sólo queda para su difusión por el canal internacional de cualquier cadena que el juez García levante el secreto del sumario. En el audio y en el vídeo se escucha y se ve al apenado funcionario decirle claramente al asombrado representante de Tao que tenía muy fácil, a la par que económico, hacerse con la gestión de los cobros de los convenios urbanísticos que negocia el Muy Ilustre Ayuntamiento de Telde. El gerente de Tao, que es de ciencias pero no entendía las cuentas que le estaban proponiendo, se quedó con los ojos a cuadros, y preguntó al funcionario que de dónde venía tan suculenta oferta. El funcionario ya daba pena a esa altura de la conversación, lo que le animó a dejar caer que actuaba en realidad como paje real, es decir, como enviado especial de la realeza teldense, que como ha quedado dicho en esta sección con la mala uva que nos caracteriza, tiene cuatro miembros, que no tres.