Antes de que termine el año

El primer acto oficial de la puesta en escena del acuerdo entre la Confederación y la Cámara se ha saldado de la manera que les estamos contando, esto es, con el reculamiento progresivo hasta el dichoso kilómetro cero. Es decir, que hasta se borran de la mente de los protagonistas aquellos entusiastas intentos de crear esa gran confederación de servicios, o la patronal paralela (y para lelos) de la construcción para ofensa y escarnio de los asociados a la AEC. Pero la verdadera demostración de que el líder plateado se cree lo que está pasando la tendremos el lunes, día 30, cuando en la reunión de la junta directiva de la Confederación Canaria de Empresarios presente su dimisión con carácter irrevocable y la renuncia a cualquier tipo de beneficio, prebenda o reconocimiento a los servicios prestados. De ese modo, la clase empresarial empezará el año con un escenario bastante distinto.