L'Hospitalet de Llobregat puede presumir de tener, a su Escuela de Música, un área de estudios de jazz manouche impulsados por el músico y guitarrista Albert Bello. Y no sólo eso, también todo un festival dedicado a esta vibrante y sustanciosa variante europea del jazz aglutinada en torno al legendario Django Reinhardt. El festival Django L'H se puso en marcha en 2010 coincidiendo con el centenario del nacimiento de Reinhardt, y desde entonces se ha ido consolidando como un punto de encuentro entre los aficionados al jazz manouche, los nuevos públicos que lo descubren y los intérpretes más destacados de la escena actual.
Uno de los puntos más importantes para la organización ha sido siempre trabajar por una programación con gran calidad musical y esto ha permitido proyectar internacionalmente el festival y la ciudad. Así pues en la edición 2015 se programó el concierto del Biréli Lagrène, uno de los mejores guitarristas de jazz de la actualidad. La llegada de público más allá de las fronteras y la gran respuesta de la gente de Hospitalet hizo posible llenar todo el aforo del Teatre Joventut.
Un hecho que podría repetirse sábado 26 de noviembre con un directo histórico en nuestro país, el concierto intergeneracional con dos guitarras y un contrabajo de Stochelo Rosenberg, uno de los máximos exponentes del jazz manouche de las últimas décadas, toda una leyenda viva. De origen sinti, comenzó a tocar la guitarra a los 10 años, ha grabado más de 60 discos -Seresta fue una revelación-, y ha actuado, entre otros lugares, en el Carnegie Hall con el gran maestro violinista Stéphane Grappelli. Le acompañarán dos de los intérpretes más potentes de las nuevas generaciones de manouche; Adrien Moignard, representante de la actual generación de guitarristas, abanderado de la velocidad y la improvisación moderna, y el contrabajista William Brunard, de base perfecta, que ha actuado con artistas como Biréli Lagrène y Tchavolo Schmitt, entre otros.
Esta no será la única actuación destacada del fin de semana, domingo 27 de noviembre en el Auditorio Barradas, Hono Winterstein, guitarrista de referencia del jazz manouche, presentará un proyecto único: un concierto con los músicos gitanos más importantes del género. Venidos de Alsacia, centro neurálgico del género, Hono Winterstein Project será un concierto al más puro estilo gipsy swing con guitarras, contrabajo, acordeón y violín, con artistas de la talla de Brady Winterstein y Samson Schmitt (guitarras solistas), Marcel Loeffler (acordeón), Martin Weiss (violín), William Brunard (contrabajo) y Hono Winterstein (guitarra rítmica). el festival programará un total de 10 conciertos de los máximos representantes internacionales delgénero, 10 clases magistrales gracias a la Escuela de Música de L Hospitalet, y 5 jam-sessions los principales clubes de jazz y salas de conciertos de Barcelona y Hospitalet de Llobregat.
Otro de los platos fuertes de este festival descentralizado tendrá lugar, martes 22 de noviembre, en El Molino con la Jazz manouche night, un homenaje a los llamados gitanos del swing que en los años cuarenta bailaban estos ritmos en el Paralelo barcelonés. Se trata de un concierto para conocer el género de la mano de tres generaciones de músicos: los jóvenes Crash Manouche, el grupo profesional Scaramouche y la EMMC Gipsy Project. Los tres grupos terminarán juntos en el escenario con el objetivo de recrear una auténtica fiesta manouche. Una pieza clave, desde sus inicios, del Festival Django es la apuesta por la formación, entendiendo el jazz manouche como una herramienta pedagógica. En este sentido, algunos de los artistas que actúan en la VII edición del festival impartirán una clase magistral, talleres de dos horas orientados a todo el que quiera aprender los secretos de los mejores guitarristas de jazz manouche del panorama actual nacional e internacional.
El jazz manouche, el único estilo genuinamente europeo de jazz estaba prácticamente olvidado en Cataluña. Hay que remontarse a los 50 y 60 cuando Pere Bonet, conocido como Bonet de San Pedro, gran conocedor del jazz y el swing, incorporó elementos de la música de Django a sus arreglos y composiciones. Tendrían que pasar más de tres décadas para que Albert Bello, un joven visionario y entusiasta, creara la Escuela de Música y un festival que forma parte de la agenda de prioridades de la ciudad de Hospitalet. El amor y pasión por el legado musical de Django, su magia y particularidad, así como la atemporalidad de su música, ha impregnado a toda una ciudad. Hospitalet es territorio manouche.
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