A la cárcel el recaudador de impuestos de una decena de pueblos

José Luis Lugones, recaudador de impuestos de una decena de municipios de la comarca de Talavera de la Reina, ha ingresado en la prisión de Ocaña I por un delito de presunta malversación de caudales públicos relativo a estos núcleos de población la mayoría procedentes de los impuestos municipales de 2013. Lugones está acusado de quedarse gran parte del dinero de los ayuntamientos a los que compete la presunta malversación, que han sido Navalcán, Los Navalmorales, Velada, Calera y Chozas, Las Ventas de San Julián, Aldeanueva de Barbarroya, Las Herencias, Cazalegas, Rielves y Alberche, todos en la provincia de Toledo y comarca de Talavera. En total suman 17.000 habitantes todas estas localidades.

El juez ha decretado para él prisión condicional comunicada y sin fianza, ingresando ya en la cárcel toledana. El “plan de pagos” presentado por Lugones a raíz del caso para devolver todo el dinero ha sido definido por el propio abogado de nueve de estos diez municipios afectados, Manuel Arroyo (a su vez alcalde de Navalcán) como “irrisorio”. El plan se basa en la venta de inmuebles y patrimonio tanto del acusado como de sus hijos y según Arroyo “no tiene fundamento y tiene poca base”, señalando además que el pago de todo este dinero se alargaría según ese plan hasta el año 2023.

En algunos municipios el dinero que presuntamente se habría llevado este recaudador de impuestos ha sido casi testimonial, si bien es muy importante al tratarse de pueblos pequeños con presupuesto muy limitado. En el caso de Navalcán, uno de los pueblos más afectados por el supuesto desfalco, se trata de una cuarta parte de todo el dinero municipal que se tendría que haber ingresado en 2013. De hecho las investigaciones parten del alcalde de este Ayuntamiento, abogado de profesión, al detectar grandes irregularidades en las cuentas y arcas públicas.

La cifra que se baraja de lo que se habría llevado esta persona de patrimonio público es más de 1.263.000 euros entre estos diez municipios a base de impuestos que los ciudadanos le pagaban a él pero de los que no daba cuenta a los consistorios.

A partir de ahora en estos pueblos se pagarán los impuestos por el Organismo Autónomo Provincial de Gestión Tributaria en vez del sistema que se venía utilizando. Este servicio ha sido puesto por la Diputación para los vecinos de las diez localidades que deberán decidir si acceden a él firmando un convenio individualizado por el que además se garantiza a estos municipios mayor liquidez puesto que la Diputación les adelanta dinero del que luego a lo largo del año van recaudando.

El dinero teóricamente sustraído por Lugones con las cantidades concretas (algunas estimadas, variables), son, de cada uno de los pueblos: