Apparat y Róisín Murphy al Paraíso, nuevo festival “de artistas visionarios”

Apparat, Hot Chip y Róisín Murphy son algunos de los “artistas visionarios” que integrarán la oferta de Paraíso, cita de música electrónica presentada hoy por sus responsables como parte de “esa nueva generación de festivales que cuida tanto el contenido como la experiencia”.

Comodidad e inquietud cultural aspirarán así a ser señas de identidad de este nuevo encuentro de la capital española impulsada por José Morán, quien fuera cofundador y codirector del célebre Festival Internacional de Beniccàsim hasta 2009, un formato con el que, tras aquellos años, “no se imaginaba volver a trabajar”.

“Con el Festival Internacional de Benicàssim casi morimos de éxito tras mucho tiempo intentando traspasar fronteras y hubo gente que dejó de venir por la masificación”, ha justificado el promotor ante su nueva apuesta, que limitará el aforo a 15.000 personas pese a que el espacio es capaz de albergar a unas 25.000.

Será los días 8 y 9 de junio en el Complejo Deportivo Cantarranas de la Universidad Complutense de Madrid (el mismo que alberga desde hace años Dcode Fest), donde podrá disfrutarse de una oferta musical “que no entrará en la guerra de cachés de otros festivales”.

En su lugar, se ha apostado por una oferta de “artistas visionarios, con un discurso muy interesante, actual y convincente para personas inquietas musicalmente, explorando los distintos territorios de la electrónica y su relación con otros estilos”.

Aunque la lista seguirá ampliándose, hoy se han presentado 26 nombres originarios de unos 13 países distintos, con el citado Apparat a la cabeza, referente del “ambient”, además de Guy Gerber, Hot Chip con su formato Megamix (que permite a la banda improvisar mientras pinchan), Hunee, Ibeyi, Palms Trax, Kiasmos y Róisín Murphy como representante de la corriente más apegada al pop.

“La electrónica lo envuelve todo ya”, ha justificado Morán sobre la línea del festival, en el que también estarán Dekmantel Soundsystem, Dj Tennis, Acid Pauli, Awwz, El Búho, Gerd Janson, Hemry Saiz & Band, HVOB, Jamie Tiller, Kalabrese, Kelly Lee Owens, Lovebirds, Mateo Kingman, Rodriguez Jr & Liset Alea, Tako, Yaeji, Yanik Park y Sahalé.

El cuidado por los detalles se percibirá en un intento por que los visitantes puedan compaginar todas estas actuaciones, que se distribuirán en tres escenarios: uno más ecléctico y minoritario, otro concebido como un club de baile de los años 80 con asientos alrededor de la pista y sesiones de DJ y, por último, el más grande y masivo para directos.

“Se cuidará mucho la escenografía”, ha prometido Morán y, para reforzar su carácter de experiencia global, se incluirán una zona de videojuegos clásicos y de realidad virtual, así como contenidos artísticos alternativos, por ejemplo “performances”, sin perder de vista la sostenibilidad medioambiental.

No menos importante, se propondrá una oferta gastronómica “rica, sana y variada” que podría estar “comisariada por uno o varios chefs” y que podrá degustarse en una zona con mesas, en su apuesta por la comodidad.

Asimismo, “todos aquellos que acudan a la primera edición tendrán prioridad para los siguientes años”, en un intento por crecer de manera orgánica y superar posibles fallos propios cometidos en FIB y en eventos ajenos como Utopía, festival de electrónica que hace dos años intentó asentarse en el mismo recinto: “Hemos tenido en cuenta aquella experiencia para aprender”, ha asegurado Morán.