Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

Banda camboyana canta contra la trata de blancas en su carrera por los Grammy

Una banda camboyana canta contra la trata de blancas en su carrera por los Grammy

EFE

Phnom Penh —

0

El grupo de música Krom ha sido preseleccionado este año para los premios Grammy, un sueño para una banda que rompe moldes en Camboya, tanto por su denuncia de la industria del sexo en el Sudeste Asiático, como por su genuino sonido acústico denominado “mekong delta blues”.

En un restaurante de Phnom Penh frecuentado solo por locales, el fundador del grupo, Christopher Minko, cuenta a Efe cómo una colaboración con la cantante camboyana Chamroeun Sophea se convirtió en 2010 en “una relación musical mágica”.

“Trabajaba en una canción del primer álbum, 'The Ying', que es sobre una prostituta en Bangkok, y necesitaba un coro femenino”, indica el músico australiano.

“Le di la melodía y lo hizo perfecto a la primera y ahí es cuando decidimos continuar”, añade.

En sus canciones la voz grave de Minko, que recuerda al Leonard Cohen de los últimos años, se intercala con la serena dulzura de la voz de Sophea, en un diálogo que fluye por los punteos de la guitarra del australiano.

“Siempre he querido atrapar ese sonido del río Mekong, realmente suena como un río, eso es lo que siempre he intentado, y junto al canto en idioma jemer crea lo que espero sea considerado un nuevo género, el 'mekong delta blues'”, sostiene Minko.

El resto del grupo, que canta en inglés y en jemer, está compuesto por Sopheak, cantante y hermana de Sophea, Jimmy Baek, músico polivalente que toca varios instrumentos, y James Sokleap, productor y pianista.

Su tercer álbum, “Mekong delta blues”, y una de sus canciones, “Lil Suzie”, han sido aceptados entre miles de competidores como candidatos a mejor álbum y mejor canción en la categoría internacional de los Grammy “raíces americanas”, aunque las nominaciones finales serán en diciembre.

Stephen Wrench, productor del álbum que trabaja para la discográfica Musik and film, afirma que la banda puede tener oportunidades en esta categoría ya que “generalmente no es para artistas consagrados”.

“Siempre he ido a contracorriente, es como con Leonard Skynard (uno de los grupos con los que el productor trabajó), cuando empezamos a tocar, solían tirarnos botellas, nos decían no valéis para nada, fuera; no les gustábamos porque hacíamos algo diferente”, rememora Wrench

En Camboya, la represión política y los valores conservadores tradicionales hacen que las temáticas de injusticia social y prostitución sean muy controvertidas, en especial en jemer.

“Canto en inglés sobre esas cosas, pero en las canciones en jemer que he compuesto no las incluyo, me refiero a que Chris escribe y canta acerca de tráfico sexual y de mujeres en inglés, pero en jemer no hay canciones que se centren en esos problemas”, apunta Sophea.

“Protejo a mis cantantes, yo me encargo de las canciones oscuras y Sophea asume la parte luminosa, es un equilibrio”, cuenta por su parte Minko.

El compositor australiano, que vivió en Tailandia y lleva veinticinco años en Asia, lamenta la proliferación de la industria sexual y su impacto en Tailandia en las últimas décadas, y teme que Camboya pueda copiar el modelo tailandés.

Todo va muy rápido en las ciudades, a las prostitutas les dan droga muy pronto, se vuelven adictas a las mentanfetaminas y poco tiempo después acaban siendo muy vulnerables, asevera el músico.

“Las tiran por la ventana, mueren o acaban durmiendo en edificios en construcción; cuando llegan a la treintena están acabadas y el ciclo se renueva constantemente”, se lamenta.

Para Minko, muchas de las canciones pueden hacer que gente se sienta incómoda y eso es precisamente lo que pretende.

Ricardo Pérez-Solero

Etiquetas
stats