“Igelak”, la comedia social de Patxo Telleria, se estrena en el Zinemaldia

El director Patxo Telleria presenta hoy en el Festival de Cine de San Sebastián “Igelak”, una “comedia social” y de enredos narrada con tono “agridulce” en la que retrata a banqueros y víctimas de los desahucios en clave de humor.

La proyección de “Igelak” seguirá hoy a la del documental sobre el lehendakari José Antonio Agirre, de Francesc Escribano, en la gala del cine vasco que se celebrará en el Teatro Victoria Eugenia y a la que asistirá Iñigo Urkullu, y la candidata de Podemos a las elecciones vascas, Pili Zabala, entre otros representantes institucionales.

En el transcurso de la ceremonia se otorgará el Premio Zinemira por toda su carrera a Ramón Barea, actor y realizador considerado uno de los máximos exponentes del cine vasco, un galardón que recogerá su esposa.

“Igelak” cuenta las tribulaciones de un director de una sucursal bancaria corrupto, Pello, interpretado por Gorka Otxoa, que es detenido y abandonado por el jefe de la sucursal que le había implicado en delitos económicos.

Por azar, Pello acaba escondido en un edificio gestionado por miembros de un colectivo antideshaucios a los que tratará de engañar para robarles el dinero y huir del país con el objeto de empezar una nueva vida.

El título del filme obedece a la fábula que cuenta que una rana salva la vida a un escorpión, pero éste le paga el favor devorando al anfibio porque “no lo puede evitar y está en su naturaleza”.

Telleria afirma a EFE que se planteó la historia como un enredo que diera pie a la comedia y a las risas pero al mismo tiempo provocara preguntas sobre el comportamiento y la ética.

“El protagonista se sumerge en un mundo antagónico” a sus valores y su forma de actuar donde los personajes son “perfectamente identificables: por un lado las personas que sufren las consecuencias de la crisis y aquellos que han contribuido a que se produzca, como es un banquero sin escrúpulos que tira del carro hacia sus propios intereses”, señala.

“No ha querido hacer una película realista”, pero sí aprovechar un tono “de fábula” y llevar el argumento y la ambientación “al extremo” para mostrar visualmente “el contraste entre los que les ha ido muy mal y a los que les ha ido muy bien”, contesta.

La elección de Otxoa para el papel protagonista fue una de las decisiones que tenía claras desde el principio “porque es un actor capaz de hacer humor, pero a la vez cuenta con los matices dramáticos que requiere el papel”.

El director de “Igelak”, rodada en euskera pero que se distribuirá también doblada por los propios intérpretes, considera que el cine vasco “ha adquirido en los últimos años un cierto grado de autoestima” porque ha sido capaz de demostrar que “desde lo pequeño se pueden elaborar productos que resulten atractivos para cualquiera”.