José Luis Gordon aborda el síndrome de Aspergem en “Todo Mujer”

La última película del realizador José Luis Gordon, proyectada en la última Seminci de Valladolid y hoy en Segovia, aborda asuntos sociales como la situación de la mujer, la vejez, el síndrome de Aspergem y la pobreza a través de los protagonistas de “Todo mujer”, interpretada por Isabel Ordaz.

El director ha explicado durante la presentación a los medios que está “condenado a ser la proa del barco que se lleva las olas”, ya que tanto con “La reina Isabel en persona” (2000), como con “Teresa, Teresa” (2003), utilizó personajes invisibles para el cine de esos años que han terminado por convertirse en arquetipos de la pantalla.

“Todo Mujer” surgió por su “fijación” con la teoría de que la mujer es un ser superior por obligada naturaleza, “una fábrica de emociones capaz de abstraerse de las banalidades”, ha advertido.

Sobre la protagonista, con la que ya había trabajado en dos ocasiones, ha añadido que es “un ente creativo de dimensiones cósmicas”.

Tras cinco años de creación, rodaje y producción Gordon ha reconocido que el trabajo ha merecido la pena porque “no es la típica película estética y estática de autor que se lleva todos los premios, sino que se acerca a los trabajos de maestros como Charles Chaplin”.

Ordaz, que ha participado en largometrajes como “Una hora más en Canarias”, “Escuela de seducción” o series como “Aquí no hay quien viva” y “La que se avecina”, ha asegurado que “no es una película fácil, ya que cuenta con muchos niveles de interpretación y una elevada provocación poética”.

Para Ordaz, esta tragicomedia rodada íntegramente en Segovia, es el trabajo “más personal” de Gordon, una obra con la que pretende homenajear a una mujer, la anti-heroína que desde la oscuridad trata de llegar a una vida posible.

Amalia, interpretada por Ordaz, es una enferma que vive como ermitaña en un palacete segoviano al límite de la realidad, hasta que se cruza en su camino un mendigo con síndrome de asperger que le cambia la vida.