Petros Márkaris reivindica la “cultura de la pobreza”

El escritor griego Petros Márkaris ha reivindicado la “cultura de la pobreza” como referencia en tiempos de crisis hoy en una conferencia en Madrid, en la que también ha afirmado sentirse “defraudado” con una Europa “que va detrás de la realidad” y ha comparado la política española con la de Grecia.

En una charla sobre la crisis de identidad y valores de Europa, previa al II Foro de la Cultura, que se celebrará en Burgos en noviembre, Márkaris también ha afirmado que el problema de Europa es “la decadencia de los partidos del sistema”, porque la sociedad “ha perdido la fe”.

“El problema del Pasok (Partido socialdemócrata griego) era que terminó siendo un partido de políticos mediocres o sin talentos y ahora está en ruinas”, ha declarado ante más de medio centenar de personas el creador del comisario Jaritos en el CaixaForum, tras ser preguntado por la actualidad política española y la crisis del PSOE en comparación con su país.

El novelista ha aprovechado, asimismo, para comparar el ascenso en ambos países de “partidos antisistema”, para asegurar que en la actualidad Syriza “es un partido del sistema que colabora con la Unión Europea” y que, en su opinión, “a Podemos le ha pasado lo mismo”.

Sobre la identidad en tiempos de crisis, Márkaris ha recordado que Grecia siempre tuvo una “cultura de la pobreza”, en la que los griegos eran “maestros” y cuyos valores “fueron arrojados cuando llegó el dinero”, pero no se recuperaron tras la crisis.

Además, ha incidido en que su “decepción” con la Unión Europea tiene que ver con que ésta comienza con el “mercado común” y no con su “cultura común”, un error que el propio Jean Monnet, uno de sus padres fundadores, reconoció.

Por eso, ahora las instituciones están “atrapadas en la economía” y para ellas “todo lo demás es secundario”, como es el caso “de la filosofía”, que “se elimina” de los planes de educación porque “no tiene mercado”, ha lamentado el escritor.

Una situación ante la que “los ciudadanos pueden salvarnos”, ha asegurado para citar como ejemplo la respuesta de sus compatriotas ante la llegada de refugiados.

En cuanto a su integración, el literato nacido en Estambul en 1937, de padre armenio y madre griega, ha afirmado que no se puede hablar de “multiculturalidad” porque “nunca ha existido”, sino de “multicomunidad”, donde las minorías “no se mezclan” y se apegan a su religión.

“En Europa hay una indiferencia absoluta hacia los refugiados”, según Márkaris, que ha puesto como salvedad el caso de Angela Merkel, por quien su simpatía “se incrementó” recientemente cuando la canciller alemana “tuvo el valor de acoger un millón de refugiados pagando las consecuencias políticas”.

Ha aclarado que ya no escribe sobre la crisis y sus consecuencias por estar “agotado” de “convivir con ella”, tras publicar la trilogía protagonizada por Jaritos, “Pan, educación, libertad”, “Con el agua al cuello” y “Liquidación final”, así como “Hasta aquí hemos llegado” a modo de epílogo.

Su último libro, “Offshore”, se centra, sin embargo, en “la falta de transparencia del dinero”, en una trama que imagina que los ingresos económicos vuelven a llegar a Grecia, “aunque no del Banco Central Europeo”, ha matizado entre risas.

Ante la algarabía general por esa circunstancia, solo el personaje de Adriani, una ama de casa (basada en su madre), desconfía de esta entrada de billetes al país por su origen desconocido.

“El problema”, ha terminado Márkaris, “es que, si el dinero es la única prueba del éxito en la sociedad, la corrupción va aparejada”, según las palabras del también guionista, que ha lamentado que “la delincuencia se ha globalizado hoy en día” y que eso supone que no se pueda acabar con la corrupción porque “la mitad del dinero en circulación en el mundo es opaco”.