Raúl Rodríguez:“De África llegaron ritmos esclavos que nos liberaron a todos”

Raúl Rodríguez es mucho más que el hijo y productor de Martirio. Amante estudioso de las músicas, en su último libro-disco, que prologa Santiago Auserón y en el que participa Jackson Browne, sube el voltaje de aquellos géneros de “raíz que ya daban calambre” hasta dar con otros nuevos como “la vudubulería”.

“La música andaluza, como toda su cultura, es un producto del mestizaje, fruto no solo de lo que salió de aquí, sino de lo que volvió”, señala a Efe en una charla en la que se felicita por “la dulce venganza de que desde África llegaran ritmos que vinieron esclavos y que nos han liberado a todos”.

La razón de la entrevista es “La raíz eléctrica” (FOL Música), en el que confluyen investigación y experimentación. Se trata, tras “Razón de Son”, de su segundo trabajo de “antropomúsica”, que “permite desarrollar la teoría de la música desde un punto de vista creativo y la creación desde un punto de vista fundamentado”, de la mano de la Antropología Cultural.

En opinión de Rodríguez (Sevilla, 1974), “la músicas de raíz en realidad se comportan como un rizoma”, concepto filosófico extraído de la Botánica según el cual “las tradiciones se transmiten sobre todo en un nivel subterráneo, por las raíces, como los tubérculos”.

De hecho, la génesis de este proyecto hay que buscarlo en Haití. Allí acudió en 2016 para participar de la mano de su amigo y legendario cantautor estadounidense Jackson Browne en “una cumbre de músicos, multiinstrumentistas y productores” en la que todos colaboraban en las canciones de los demás junto a músicos locales.

Así surgieron “Let the rythm lead”, en la que colabora Browne, y “El viajero”, los dos primeros temas de “La raíz eléctrica”.

Convencido de que “el investigador también tiene que participar de la fiesta”, Rodríguez pone su pequeño grano de arena para recuperar “la veta creativa de la España ibérica que no tenía miedo del futuro a principios de los 80 y finales de los 70”.

“En el título juego con el doble sentido de las músicas de raíz que sí transmiten un calambre y con el calambre de la electricidad con el que crecimos los hijos del rock andaluz de Pata Negra, de Smash... Yo intuía que iba a ser la música del futuro, pero el futuro se escribió de otro modo”, rememora.

Aún así, Rodríguez cree que si aquellas fusiones hubiesen tenido el apoyo de la industria, “la música andaluza habría caminado en la dirección de Camarón y 'La leyenda del tiempo' y hoy competiría en potencia con el reggae o el rock and roll”.

No todo es mirar al pasado. En su afán experimental, su nuevo álbum ofrece algunos hallazgos como el tres eléctrico, un instrumento resultado de combinar el tres cubano y la guitarra eléctrica para dar soporte a su “afroflamenco eléctrico”.

Además, propone géneros nuevos a partir del encuentro de la bulería con otras músicas, como la vudubulería, mezcla con cantos haitianos; también la sonería, que la mezcla con el son cubano, y la blueslería, con el blues.

Con su banda habitual (Mario Mas, Guillem Aguilar, Pablo Martín Jones y Aleix Tobias), la misma que ha grabado el disco, en breve iniciará una gira para dar una muestra en vivo de todo esto “e incluso baile flamenco donde se pueda”.

El 30 de septiembre está previsto que actúe en Las Palmas de Gran Canaria (Festival Arrecife de las Músicas, Auditorio Alfredo Krauss), el 7 de octubre en la localidad barcelonesa de Manresa (Fira), el 12 de octubre en Barcelona (Festival Connexions, sala Apolo), un día después en el festival sevillano Monkey Week y el 23 de noviembre en el Café Berlín de Madrid.