El cineasta Pablo Trapero reivindica la ficción para explicar la realidad

El cineasta argentino Pablo Trapero ha reivindicado hoy en Valencia la ficción, que permite, ha dicho, reflexionar sobre cuestiones, ya sean grandes temas sociales o asuntos más intimistas, que en la vida real “cuesta mirar de frente”.

Trapero, uno de los más destacados cineastas latinoamericanos, recibe hoy el premio Luna de Valencia que otorga el Festival Internacional de Cine de València Cinema Jove, en el que se proyecta toda su filmografía, con cintas como “El clan” y “El bonaerense”.

En una rueda de prensa, el cineasta ha defendido el potencial del cine para reflexionar sobre situaciones o personajes “que no siempre son los que encontramos en la primera página” de los periódicos, y que permite mirar de frente una realidad distinta a la que de forma fragmentaria abordan los medios de comunicación.

“Esas mismas personas pagan una entrada para ver una realidad que en otros lados es difícil de enfrentar”, ha señalado y se ha mostrado satisfecho de que algunas de sus películas hayan provocado leyes o mejoras sociales en Argentina.

El director, nacido en San Justo (Argentina) en 1971, ha agradecido este premio y ha recordado que su abuela paterna, que vivía en un pueblo de Segovia, le decía que siempre estaba “a la Luna de Valencia”.

Sin embargo, ha señalado que le da “miedo” entrar en la etapa de homenajes porque le hace sentir que las mejores películas han pasado, cuando él se siente joven y sus ganas y su energía a la hora de iniciar cada película “siguen intactas” desde que empezó a rodar su primer largometraje con 25 ó 26 años.

Sobre sus proyectos de futuro, ha avanzado que trabaja en varias películas fuera de Argentina y una en ese país, que probablemente sea su próxima película, titulada “La Quietud”, y no descarta en un futuro rodar alguna película en España.

Coetáneo de Lucrecia Martel, Martín Rejtman, Adrián Caetano y otros jóvenes directores que comenzaron a despuntar desde Argentina a finales de los 90 y principios de los 2000, Trapero ha trazado desde entonces una trayectoria en curva ascendente, con títulos como “El bonaerense” (2002), “Nacido y criado” (2006), “Leonera” (2008), “Carancho” (2010), “Elefante blanco” (2012) y “El clan” (2015).