La evolución de la escultura en España a lo largo del siglo XX se muestra en Zaragoza

Las relaciones entre el dibujo y la escultura y la evolución histórica experimentada por este último arte a lo largo del siglo XX en España a través de obras de Dalí, Chillida, Gaudí, Picasso, Oteiza o Pablo Gargallo se exhiben desde hoy en el Palacio de Sástago de Zaragoza.

La exposición, “Dibujar el espacio. De Picasso a Plensa”, está formada por 80 obras, 35 esculturas y 45 dibujos, pertenece a la Fundación ICO y cuenta entre sus fondos con obras de 40 artistas españoles, entre los que también se encuentran Antonio López, Pablo Palazuelo, Jaume Plensa, Antonio Tapiès, Miquel Barceló, Óscar Domínguez, Ángel Ferrant, Julio González, Juan Gris o Joan Miró.

Con esta propuesta, que podrá contemplarse hasta el próximo 17 de mayo, se pretende que los visitantes puedan realizar en una hora un repaso a la historia de la escultura del siglo XX en España, un país que no ha sido tradicionalmente de escultores pero en el que los pintores son “los que renovaron esta disciplina artística en el pasado siglo”.

Así lo ha destacado Gonzalo Doval, responsable del área de Arte de la Fundación ICO, en la presentación de la muestra, en la que ha estado acompañado por la directora de la entidad, Mónica de Linos, y por el diputado de Cultura de la Diputación Provincial de Zaragoza, José Manuel Larqué.

La colección ha visitado ya otras veinte ciudades españolas, como Valladolid, Cáceres o La Coruña, y un número similar de ciudades europeas, americanas y asiáticas, como Varsovia, Santiago de Chile o Pekín.

Doval ha incidido en que a finales del siglo XIX la escultura estaba denostada por los artistas de vanguardia, si bien los pintores la renovaron por completo abandonando sus principios tradicionales, como el volumen o los materiales.

También modificaron sus valores hasta alejarse de la representación de la figura humana en sentido clásico y se adentraron en la abstracción geométrica y en la convivencia de materiales nobles, como el bronce o la madera, junto con el corcho, la hojalata o el aluminio.

Así, la colección de esculturas con dibujo que exhibe el Palacio de Sástago tiene “vocación enciclopédica”, según Larqué, y plantea un recorrido por estos cambios a través de obras agrupadas en diferentes salas.

Esta exposición es una de las tres colecciones de arte propiedad del Instituto de Crédito de Crédito Oficial (ICO) que gestiona su Fundación, junto a una de pintura española contemporánea y la “Suite Vollard” de Picasso.

El objetivo de esta fundación pública estatal, creada en 1993, es difundir la cultura española a través de cuatro áreas de actuación: la formación, los estudios y publicaciones, el entendimiento y el arte, ha explicado su directora, Mónica de Linos.