El primer año del Acord del Botànic según el PP: “Cero iniciativas, Cero resultados”

La líder del PP valenciano, Isabel Bonig, ha hecho un resumen muy negativo de los primeros meses del gobierno de la Generalitat formado por el PSPV-PSOE y Compromís: El Acord del Botànic habría degenerado en el “gobierno del Titanic” que, siguiendo la metáfora, en vez de “rescatar personas” estaría hundiendo el barco. En resumen: un año -el presidente Ximo Puig anunció su gabinete el 29 de junio de 2015- con “0 iniciativas, 0 resultados”.

No hay proyecto. Según Bonig, el Consell carece de empuje e ideas. “Sus iniciativas estrella -el cheque energético, los planes de empleo Avalem y la reivindicación del corredor mediterráneo y una mejor financiación- son heredados del PP. A diferencia de lo que hicieron ellos cuando estaban en la oposición, nosotros no somos desleales y ahí les apoyamos”.

Se despilfarra. El gobierno valenciano subió el salario el 1% a sus altos cargos, igual aumento que el de los funcionarios. Además, ha gastado 34.000 euros en un video para mejorar la reputación valenciana y pagará 300.000 euros para promocionar la gira de un cantaautor, Raimon, siempre según Bonig. Puig, además, disfrutaría de 176 asesores frente a los 44 que tenía el anterior presidente, Alberto Fabra, del PP. “Y la vicepresidenta [Mónica Oltra] hablaba de 'emergencia social'. Con ese dinero se habría podido pagar a 40.000 dependientes que no cobran”.

Ni trabaja ni escucha. “Ha sido pisar moqueta y dejar al margen a la gente, eso sí, subidos en el coche oficial. De los 542 municipios de la Comunidad Valenciana 411 no han sido dignos de ser visitados por ningún alto cargo del Consell. Hay que trabajar más y escuchar a la gente”, dice Bonig.

Un Consell opaco. “La transparencia” de la actual administración contra el oscurantismo de su predecesora, dominada por el PP, es un mito, asegura Bonig. “Puig ha estado 55 días sin comparecen en las Corts Valencianes, el 70% de las preguntas hechas por el PP cumpliendo su papel de oposición no han sido contestadas y los consellers rechazan mayoritariamente las peticiones de nuestro partido que se expliquen en el parlamento valenciano”.

“Radicales y sectarios”. Las medidas educativas habrían sido dirigidas contra la concertada, así como la decisión de impedir las prácticas en hospitales públicos a estudiantes de universidades privadas tendría un sesgo ideológico. “Gobiernan para los suyos”.

Caos y parálisis. “El Consell no tiene ningún plan para crear empleo. Además, presupuesta 1.300 millones de los que carece, crea confusión con los horarios comerciales y no ha presentado ni una ley, apenas un anteproyecto sobre vivienda”.

Tras la catarata de críticas, se le ha preguntado a Bonig por alguna cualidad del gobierno de Puig. “Lo único, que venden muy bien las cosas”.