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El PP impide una declaración que exija las inversiones pendientes en Valencia

El Ayuntamiento de Valencia aprueba el cambio de nombre de la ciudad a 'València'

Carlos Navarro Castelló

El pleno del Ayuntamiento de Valencia de este mes de octubre, que se celebra este jueves, no contará con una declaración institucional que pretendía reivindicar las inversiones necesarias para la ciudad de Valencia.

A pesar del consenso entre los 3 grupos que apoyan en el gobierno municipal (Compromiso, PSPV y València en Comú) y el Grupo Municipal Ciudadanos, el Grupo Popular ha decidido no adherirse a la propuesta, imposibilitando así su presentación al Pleno.

“El mismo día que Pablo Casado, en representación de la dirección del Partido Popular, visita Valencia para intentar convencernos de que los interesan las inversiones y las infraestructuras de nuestra ciudad, el Grupo Municipal del Partido Popular del Ayuntamiento se niega a presentar al pleno una declaración institucional a favor de esas infraestructuras necesarias que estaba consensuada por el resto de grupos”, ha manifestado el alcalde Joan Ribó ante esta negativa a suscribir el documento por parte del PP.

El alcalde Ribó ha añadido que los representantes del Partido Popular “no tienen ninguna credibilidad y son los únicos que se quedan a solas en querer marginar a Valencia; ni túnel Pasante, ni Corredor Mediterráneo ni nueva Estación dela AVE, ni nada de nada”.

La mencionada declaración institucional que no irá al pleno por la negativa de los concejales del PP empezaba afirmando que “los problemas estructurales de la ciudad de Valencia, fundamentalmente en materia de infraestructuras de movilidad y transporte ferroviario y de la red básica de saneamiento , tienen que resolverse necesariamente con la colaboración programática y financiera del Gobierno Central”.

“Desatención sistemática”

Continuaba señalando que “día tras día la ciudadanía de la Valencia va tomando conciencia de la desatención sistemática con que la administración central banaliza las solicitudes, reclamaciones y exigencias que, desde un posicionamiento unitario costosamente trabajado, realizan la administración local, tanto el gobierno como la oposición municipal, las entidades ciudadanas, universitarias y empresariales”.

Ante esa situación el Ayuntamiento de Valencia “se encuentra en la necesidad y la obligación de denunciar nuevamente la trascendencia y la gravedad social y económica de la marginación de que es objeto la ciudad de Valencia por parte del Gobierno Central y, particularmente, del Ministerio de Fomento”.

También se apuntaba en este documento que “el Túnel Pasante ferroviario que ha de dar la solución de futuro al actual tapón de la Estación Central con la salida sepultada hacia el norte, es una obra que dispone de proyecto técnico aprobado y financiación exclusivamente a expensas del Ministerio de Fomento, por lo que es ejecutable de manera independiente a los plazos del resto de los proyectos del Parque Central”.

“Es esta una obra estratégica en las previsiones de Corredor Mediterráneo puesto que constituye la única alternativa a la inmediata congestión de tránsito al túnel de Serrería. Así mismo, la prolongación del soterramiento de las vías ampliando este túnel en dirección sur hasta la CV500 es una obra imprescindible para el desarrollo urbano, largamente reivindicada y respecto de la cual ADIF, dependiente del Ministerio de Fomento, mantiene un inexcusable secretismo”, se afirmaba en otro párrafo de la frustrada declaración institucional, donde igualmente se hacía mención a que “queda pendiente en Valencia el acondicionamiento del nudo Intermodal de Fuente de San Luís, de relevante importancia logística con el traslado de las actuales instalaciones de Silla”.

En otro apartado se resaltaba que “el Ayuntamiento de Valencia, junto a todos los municipios del área Metropolitana, han trabajado con intensidad y urgencia en la creación de la futura Autoridad Metropolitana del Transporte que permitirá alcanzar un Contrato Programa que garantice las condiciones de sostenibilidad de la movilidad integral de nuestro entorno, y no merece la displicencia con que desde el Gobierno Central se pretende obstaculizarla”.

Otras inversiones mencionadas se referían a “la materialización del tramo final del Colector Norte de aguas pluviales del sistema de saneamiento de la ciudad, entre el Azud del Oro y la desembocadura, contemplada en el plan de cuenca y comprometida financieramente por la Confederación Hidrográfica del Júcar. Aun así, la reclamación de inmediatez que repetidamente formula el gobierno municipal no ha sido nunca atendida a pesar de que representa la respuesta inaplazable a las condiciones de insalubridad de este sector final del Turia y la condición necesaria para realizar el tramo final del Jardín del Turia”.

También pedía al Gobierno Central “las medidas necesarias para hacer frente a la deuda millonaria contraída por el Consorcio Valencia 2007 con las correspondientes instituciones crediticias y organismos dependientes de la administración central del Estado” y , finalmente, afirmaba que “en la coyuntura actual, la conformación de los Presupuestos Generales del Estado de 2017 es una irrenunciable oportunidad para hacer sentir nuestra voz y exigir que se reconduzca y se acabe con la profunda discriminación que los valencianos hemos venido soportando a lo largo de los últimos ejercicios”.

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