Un 'cisne porno' para romper los tabúes
Si la intención es romper los moldes, ser más transgresores que nadie, Las Naves lo ha conseguido. Su apuesta por una actuación irreverente, donde se combina lo más clásico de la danza con toques de porno, de erotismo, es un ejercicio arriesgado, un desafío al espectador.
La obra denominada 'Wakefield Poole: visiones y revisiones', está capitaneada por Mauricio González. En ella, el artista canario rinde tributo al bailarín Wakefield Poole, quien después de interpretar en multitud de ocasiones 'El lago de los cisnes' se pasó al porno gay. Una transformación que González ha querido plasmar en su actuación, ya que relacionará el ballet clásico de 'El lago de los cisnes' con la película de contenido sexual 'Boys in the sand'.
Para ello, el bailarín actuará vestido de cintura para arriba de Príncipe de Albrech y complemente desnudo de cintura para bajo. Así, pretende fusionar esas dos concepciones en un mestizaje atrevido y que pretende no dejar indiferente al público que asista al estreno que tendrá lugar este viernes día 6 en el Espai Muntant de dicho contenedor cultural. En su propósito, además, contará con la ayuda de un vídeo para comparar las similitudes entre personajes y situaciones de ambas obras, tanto de la clásica como de la erótica.
“Es una pieza que interroga directamente y sin tapujos la representación coreográfica del sexo, con toda la carga simbólica que eso conlleva”, afirma Guillermo Arazo, responsable de la programación del complejo cultural. El objetivo de provocar al espectador es claro con una escenografía tan rompedora.
Frente a una actuación tan polémica, Las Naves quiere debatir este vínculo extraño, complejo y tortuoso entre la danza y el porno. Y así, organiza la mesa redonda 'Coreografías Pornográficas' un día antes del estreno de la obra en la que se reflexionará sobre esa relación. La comisaria Marisol Salanova, el artista especializado en performance Abel Azcona, el creador interdisciplinar Saúl Sellés y la gestora cultural Carmen Bueloha serán los encargados de debatir sobre este espectáculo y sobre el vínculo que plantea impúdicamente González. Transgresión en estado puro.
