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La secció que es proposa pretén ser un espai dedicat a tot el relacionat amb les festes de València, en el qual les Falles i tots els sectors culturals vinculats a les mateixes tinguen un especial protagonisme.

“Las Fallas tienen el reto histórico de dignificar al máximo la figura de la mujer”

El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset

Carlos Navarro Castelló

Valencia —

El concejal de Cultura Festiva y presidente de Junta Central Fallera (JCF), Pere Fuset (Compromís), afronta sus segundas Fallas tras superar la crisis provacada por las polémicas normas de protocolo para las falleras mayores y su corte y con el reto de avanzar hacia la excelencia que exige una fiesta declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Para ello es imprescindible, entre otras cosas, mejorar la conviviencia en la ciudad y en ese sentido, son numerosas las novedades que se apreciarán en los próximos días.

¿Tuvistéis algún resquicio de dudas sobre la declaración de la Unesco o estabais seguros de que se conseguiría?

Sí que nos preocupaban algunos aspectos que habían suscitado alegaciones por parte de ciudadanos de Valencia. Uno estaba relacionado con los materiales que se emplean, en los que también estamos trabajando con proyectos de investigación para encontrar nuevos materiales más sostenibles y potenciando y valorando los materiales que se utilizan actualmente en las fallas con premios nuevos a la sostenibilidad. Y la otra cuestión que nos podía preocupar era la vinculación artificial que se hace de las fiesta de las Fallas con los actos taurinos en la plaza de toros.

¿Os habéis planteado negociar con la empresa de la plaza de Toros una moficiación de fechas de la feria de Fallas o que se cambie el nombre del festejo?

No tenemos competencias al respecto, lo que sí que trasladé en todo caso al diputado de la plaza de Toros de la Diputación de Valencia fue nuestra voluntad de dejar clara y manifiesta que las Fallas no tienen nada que ver con esos actos. Lo que es más complicado es evitar que coincidan en fechas o que se cambie el nombre, pero en la actividad de promoción de las Fallas que hacemos nosotros y Turismo Valencia evitamos que se relacione.

Quizás el tema más polémico desde que dirige Junta Central Fallera fue el de las normas de protocolo de la Fallera Mayor de Valencia y su Corte, ¿qué pasó exactamente para que se redactara un documento así?

Lo que resulta curioso es que esas normas que llevaban vigentes desde hacía décadas salieran a la palestra a una semana de la declaración de las Fallas como Patrimonio de la Humanidad. Lo que me da a entender que fue una operación política orquestada por parte de determinados sectores conservadores de la fiesta. No hay nada más que leer el texto de reprobación de la asamblea para entender que estamos hablando de sectores muy vinculados a la derecha.

Pero ustedes tenían en su mano cambiar el texto de esas normas y no lo hicieron, ¿por qué?

Yo creo que había que cambiar esas normas, de hecho, cuando esto saltó a la polémica hacía un mes ya que había declarado mi intención de anularlas y lo que sí que tengo claro es que solo los que sabían que esas normas existían porque las habían redactado podían activar el botón de detonación en el momento en el que les interesara y ese momento fue el más inoportuno. Creo que por querer desgastar a esta directiva de Junta Central Fallera (JCF) se hizo un flaco favor a las Fallas. A partir de ahí, como dije, esas normas ya se había anunciado su revisión con anterioridad a la polémica y es este equipo el que apuesta por hacer ese cambio para evitar ese lenguaje a mi entender bastante inapropiado como manifesté en reiteradas ocasiones.

Cuando se les entregó ese texto a las falleras, ¿no se revisó su contenido para ver si era acorde a lo que quería la directiva?

Junta Central Fallera es un organismo autónomo municipal muy particular, en el cual se nutre de más de un centenar de voluntarios sin designación política, que están enviados por las fallas. Y no es mi misión revisar los usos y costumbres que realizan cada uno de ellos. Es cierto que no detecté el contenido de esa práctica hasta muy tarde, pero también es cierto que en el momento en el que la detecté salí a la palestra para decir que era necesaria esa revisión.

¿De cara a las futuras falleras mayores y cortes de honor se les dará un documento con un texto diferente, se les dará unas pautas orales o cómo se les facilitará esa información de protocolo?

Aún no sé cómo actuaremos, pero creo que no hay que ir más allá de lo que la responsabilidad de un cargo como la Fallera Mayor o la Corte de Honor necesite. En cualquier caso si hay un nuevo reglamento creo que debe servir para un reto histórico que tenemos en la fiesta que es el de dignificar al máximo la figura de la mujer. En ese sentido me preocupa más el techo de cristal que tiene la mujer para acceder a cargos como el de presidenta que cuestiones relacionadas con la indumentaria, pero una de mis apuestas decididas es esa. No es casualidad que tenga la primera directiva paritaria de la historia, donde las mujeres son mayoría o que haya optado por mantenedoras, por visibilizar el papel de la mujer en otros ámbitos como puede ser la pirotecnia o el periodismo.

En las fiestas de Vinaroz se ha abierto la posibilidad de que pueda haber niños en la corte de honor de la reina infantil, e incluso de que pueda haber un rey infantil, ¿se podría plantear algo parecido aquí?incluso de que pueda haber un rey infantil

Yo recibo cientos de mensajes a trevés de las redes sociales y últimamente uno de los que más recibo es la creación de una figura como puede ser la del presidente infantil. Sin embargo, no depende ni del presidente, ni de la directiva. Son los propios falleros y falleras los que en su reglamento, revisado en cada congreso fallero, tienen la oportunidad de hacer esos cambios. Es importante que los falleros y falleras tomen conciencia de cómo articular esos cambios para producirlos.

¿Pero usted como presidente tampoco puede proponerlo?

No, tampoco. Es el reglamento fallero y son los representantes de ese congreso fallero los que determinan. Las capacidades del presidente de JCF son muy limitadas. El reglamento fallero está aprobado por los propios falleros delegados en cada congreso y son esos los artículos que después rigen la fiesta. Creo que hay gente incluso que aún quiere limitar más la capacidad del presidente de JCF para regir la fiesta y creo que es algo que debe abordarse sin tapujos. Eso se llama independencia de la fiesta. Lo que no se puede pretender es que la gente me pida responsabilidades a mí por decisiones que yo no tomo y no tengo capacidad de cambiar.

Sí que está prevista la celebración de un congreso fallero para después de Fallas, ¿no?

Lo que hice fue anunciar que vamos a iniciar consultas con los diferentes agentes sobre la conveniencia o no de convocar ese congreso después de Fallas. Yo creo que debe ser muy determinante en algunos ámbitos y por tanto tenemos que generar el máximo consenso posible, pero me temo que por factores políticos hay gente que está remando en la dirección contraria, en la de la crispación. No es el mejor ecenario para un congreso fallero en el que abordar grandes retos.

¿Cuáles son esos retos que cree que se deben abordar?

Para mí uno de los retos debe de ser introducir la profesionalización en algunos sectores de JCF. Actualmente se nutre exclusivamente de voluntarios. Creo que hay que hacer una apuesta decidida por una equiparación real de la mujer en la fiesta, porque existen techos aunque solo sean de cristal. La implicación de los jóvenes en la fiesta creo que también es otro reto. Después decidir de alguna manera flexibilizar la estructura para que los cambios se puedan realizar sin la necesidad de pasar por un congreso, que en ocasiones se distancias décadas unos de otros.

Se hablaba también de abordar una posible separación entre JCF y el Ayuntamiento.

Lo tienen que abordar los participantes en el congreso fallero. Tienen que decidirlo y por eso ese debate tiene que llegar a los casales, hay más de 100.000 falleros por lo tanto hay que ser muy cuidadosos a la hora de hablar en boca de todos ellos. Es una posibilidad real y parece que determinados sectores aprovechando la coyuntura política se están posicionando por sacar a las fallas del Ayuntamiento. Me parece respetable, pero hay que asumir las consecuencias.

Si se produjera una separación efectiva, ¿cómo se gestionarían aspectos como las subvenciones?

Mediante acuerdos puntuales, mediante convenio, en la cual miraríamos qué es lo que cubre cada uno y qué es lo que no cubre. Como con cualquier otra entidad privada. Las fallas serían entidades privadas con muchísimo peso en nuestra sociedad, tejido asociativo, con el cual se podría llegar a acuerdos de colaboración.

¿Qué opina usted sobre esa posibilidad?

Yo creo que la corresponsabilidad, si es asumida con respeto a todas las partes es una buena opción. Lo que no entiendo es que exista una politización de la fiesta o, hablando en plata, que para querer hacer oposición al tripartito se crispe y se tense como alguna gente está haciendo en el ámbito de la fiesta. Creo que separar es bueno, pero hay muchas formas de hacerlo. Se puede hacer desde el respeto y la colaboración mutua o simplemente desde una independencia.

Centrándonos en lo que serán estas Fallas, el bando sigue avanzando en la línea de intentar atajar determinados excesos que ha habido en el pasado en cuanto a ocupación de las calles con mercadillos y puestos de comidas.

La fiesta es un motor social, cultural y económico de primer orden y que como tal, siempre genera molestias y las va a seguir generando, pero el conjunto de la sociedad valenciana debe entender que es mucho más lo positivo que lo negativo. Pero creo que también el propio colectivo fallero debe hacer una reflexión y ver por qué la imagen de nuestra fiesta ha empeorado en los últimos años. Eso requiere de una serie de medidas que creo que no se habían tomado antes, precisamente por evitar posibles conflictos. Yo prefiero actuar con un poquito de valentía y diálogo y de ahí las cuestiones como las que hemos aprobado este año como la redefinición de los modelos de mercadito o el tema de los puestos de comida ambulante en caravanas.

¿Habrá suficiente dotación policial para controlar todo esto, así como el uso indiscriminado de petardos fuera de las zonas habilitadas?

No es un tema de mi competencia, pero yo lo deseo. También entiendo que en una fiesta como las Fallas es imposible poner un policía cada 10 metros y con cientos de miles de personas en la calle la máxima es apelar a la responsabilidad de los ciudadanos. El año pasado encontramos en el programa de fiestas una serie de recomendaciones a todos los agentes de la fiesta y creo que se trata de hacer esa pedagogía para fomentar la convivencia.

¿Veremos algún acto novedoso?

Habrá muchas novedades en pirotecnia. El año pasado ya le dimos mucha importancia a la plantà con un espectáculo propio y este año vermos la plantà de la falla municipal al tombe como gran novedad. También queremos trabajar la cabalgata del ninot y consolidar la Cabalgata del Patrimoni que queremos que sea una oportunidad para mostrar manifestaciones festivas de todo el mundo coincidiendo con las Fallas.

¿Tenéis alguna estimación de afluencia de gente este año que las fiestas cogen todo un fin de semana?

No, lo que sí sabemos es que la coincidencia con el fin de semana, el hecho de que el 20 de marzo sea festivo en Madrid y la declaración de la Unesco van a propiciar que este año sea un muy buen año en cuanto a visitantes. También cabe recordar que hemos trasladado un festivo al 17 de marzo de manera que también los ciudadanos de Valencia puedan disfrutar de un festivo más. Eso requiere de mayor seguridad, de mayor control y se va a traducir en un refuerzo.

A buen seguro surgirá el debate del cambio de fecha de la cremà a un lunes de forma que la fiesta siempre caiga en fin de semana, ¿piensan estudiar esta opción o al menos abrir el debate?

No, no está en mis planes consultarlo. De todas formas, el año que viene servirá como mejor ejemplo puesto que la cremà caerá lunes tal y como se reclamaba. Yo creo que ese debate se enfocó muy mal en su momento tanto políticamente como socialmente y las fallas se manifestaron mayoritariamente en contra del cambio. Creo que no se explicó los beneficios que puede tener para el conjunto de la ciudadanía el hecho de que tanto los que participamos como falleros como los que no lo hacen, no trabajen los días que hay fiesta en la calle.

¿Y se plantean la posibilidad de mantener la celebración de San Vicente siempre domingo para usar ese festivo en Fallas como se ha hecho este año?

Yo creo que sería positivo estudiarlo y valorarlo. El Corpus pasó de un jueves a un domingo y gana en auge cada año. La fiesta de la Mare de Déu dels Desamparats pasó del 8 de mayo al segundo domingo de mayo y ha ganado. Creo que la Iglesia podría plantearse también trasladar sus actos festivos de San Vicente Mártir a domingo de manera que incluso gente de fuera de la ciudad de Valencia pudiera participar en sus actos. Si de esa manera pudiéramos disponer de un festivo más para dejarlo en Fallas, creo que todos podríamos salir ganando.

¿Cómo han abordado este año el polémico tema de la iluminación que ponen las fallas Cuba-Literato Azorín y Sueca-Literato Azorín?

Nosotros este año, igual que con las carpas, hemos reducido los tiempos de montaje. El año pasado trabajamos con estas fallas para pedir que planificaran los trabajos para que tuvieran la menor incidencia posible y me consta que la voluntad de las fallas de Ruzafa es positiva y que siempre están consensuando con las plataformas de vecinos. Siempre puede haber versos libres que quieran crear polémica, yo les pido a las fallas que no abusen y al resto de la ciudadanía que sean comprensivos.

El presupuesto municipal está subiendo estos años, ¿estudiarán un incremento de la subvención del 25% al monumento?

Hicimos una mesa de negociación con los agentes falleros y llegamos a un acuerdo de mantener esa ayuda en el 25% y reducir un poco la de iluminación para poder aumentar la de bandas música que hasta ahora no contaba con subvención. El año pasado ya dimos 30.000 euros y este año va a subir hasta los 80.000 euros a repartir entre las fallas. Me gustaría a lo largo de la legislatura introducir ayudas a otros elementos como la pirotecnia.

En cuanto a las verbenas, ¿seguirán fomentando la cooperación entre comisiones como fórmula para reducir molestias?

Sí, el año pasado lanzamos el programa pionero 'Germanor' para potenciar que diversas fallas se puedan juntar para hacer la verbena de Sant Joan, de manera que aumente la calidad del espectáculo y se reduzcan las molestias. Las fallas participantes, aunque fueron pocas, están satisfechas con la experiencia. Por tanto pensamos que es algo a analizar y que trataremos de potenciar primero en Sant Joan, y después, si fuera posible, también en Fallas.

El PP siempre le critica un excesivo uso de los contratos menores.

Una de las cosas de las que más orgulloso estoy es de la regularización de muchas cosas que antes eran irregulares en JCF. Este año hemos realizado cosas como cerrar una cuenta en B en la cual se hacían ingresos y pagos fuera de todo control fiscal. Nosotros trabajamos con contratos menores porque si un ramo de flores vale 100 euros, no vamos a pagar por él 18.000 euros. Por otra parte es la única manera de evitar realizar un concurso que retrasaría los plazos hasta cuatro o cinco meses. Trabajamos con total transparencia. Es la primera vez por ejemplo que se publican los presupuestos de JCF en la página web y la oposición tiene acceso a todos los documentos que ha pedido en tiempo y forma sin ningún tipo de obstáculo. Siempre trabajamos dentro de la ley y quien piense lo contrario, debería denunciarlo en los tribunales.

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