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La televisión de los obispos intenta ocupar el hueco dejado por Canal 9 en el deporte

Los trabajadores de RTVV en una propuesta contra el cierre.

Voro Maroto

TV Mediterráneo, la televisión propiedad de la Conferencia Episcopal, sigue moviendo ficha. Tras anunciarse como el relevo natural de Canal 9, y destituir a su responsable para contratar a un exprofesional de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) bien conectado con el PP, ha dado un paso más: retransmitirá varios partidos del Valencia Bàsquet, el único equipo valenciano en la ACB, para intentar ganar audiencia y prestigio.

La televisión ya ha llegado a un acuerdo con la ACB, la empresa que organiza la liga española de baloncesto. Adquirirá un paquete de partidos como local del equipo propiedad de Juan Roig, dueño y gestor de Mercadona. Los encuentros se elegirán en función de la decisión de Televisión Española –o su canal deportivo, Teledeporte- y la Forta, la agrupación de televisiones autonómicas a la que pertenecía Canal 9, que tienen preferencia a la hora de elegir.

El primer partido a retransmitir podría ser, a falta de confirmación, el Valencia-Joventut. Los choques serán retransmitidos en valenciano por el trío de profesionales que, durante mucho tiempo, hizo lo mismo en Canal 9: Fermín Rodríguez (narrador), Nacho Herrero (periodista a pie de pista) y Nacho Rodilla, el mítico exjugador del Pamesa nacido y críado en la cantera del Llíria, como comentarista.

Mientras, poco se sabe de las alternativas a Canal 9 de las que ha venido hablando el Consell, que acaba de elegir al despacho de abogados que procederá a ejecutar el ERE de extinción en Canal 9. Se trata de KPMG, la consultora elegida por Bankia para vender el Valencia a un inversor que será extranjero. Mientras, cada día con los trabajadores de Canal 9 sin empleo pero con sueldo, cuesta 200.000 euros al contribuyente.

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