Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Sobre este blog

Me dedico al periodismo, la comunicación y a escribir libros como “Exceso de equipaje” (Debate, 2018), ensayo sobre el turismo que se desborda; “Biciosos” (Debate, 2014), sobre bicis y ciudades; y “La opción B” (Temás de Hoy 2012), novela... Aquí hablo sobre asuntos urbanos.

Música para disfrutar en domingo una Calle Abierta

La energía del Cicloescenario la pone la gente

Pedro Bravo

No estuve allí, pero supongo que cuando Moisés hizo el truco en el mar Rojo, los que le seguían se lo tuvieron que pensar bastante a la hora de plantar el pinrel entre semejante flujo de agua. Algo parecido ha pasado en estos primeros domingos de Ciclovía en el Paseo del Prado. O eso he visto el par de veces que, esta vez sí, he pasado por ahí. La gente miraba esa calle que normalmente es un río lleno de una corriente de coches, motos, buses y camiones y la veía vacía y, por eso, no terminaba de animarse a pisarla, a vivirla. La costumbre dice que es territorio de los coches y no de la gente de a pie y la costumbre es un océano sobre el que cuesta mucho saltar.

La idea de la Ciclovía madrileña es ésa, empezar a cambiar algunas (malas) costumbres. Desde que empezó en septiembre, aprovechando la Semana Europea de la Movilidad, la afluencia de gente ha ido creciendo… un poco. Conozco a algunos vecinos del barrio de las Letras que no terminan de entender el asunto precisamente porque no ven mucho humano disfrutando de la calzada. Normal. No se entiende una actividad que ofrece la calle a la gente si no hay gente en la calle.

Calle Abierta es una idea para sumar en este objetivo común, el de recuperar espacios para todos. Calle Abierta es un programa de actividades culturales y musicales gratuitas que tienen lugar los domingos en la Ciclovía del Paseo del Prado. De momento, tres domingos antes de que acabe el año, empezando por éste que viene ya mismo (luego vendrán el 15 y el 29 de noviembre).

Calle Abierta es un proyecto que ofrece al Ayuntamiento de Madrid Ciclalab, laboratorio creativo que aúna cultura, innovación y medio ambiente, pionero en España en generación de energía con bicis y agitador de la cosa ciudadana de Madrid desde hace tiempo. Por eso hablo con Natalia, una de sus responsables: “Como mucha gente, esperábamos con muchísimas ganas que llegara por fin la Ciclovía de Madrid, que era algo que veníamos clamando en trabajo conjunto con otros colectivos. En cuanto vimos que era una realidad, no paramos de cocinar ideas para contribuir a que se consolide como un espacio ciudadano y permanente. A una calle sin tráfico hay que acompañarla con actividad, con cultura, con participación”.

Inspirados en la Ciclovía bogotana, la pionera, y el resto de las latinomericanas pero también en los eventos open streets (de ahí Calle Abierta) que se hacen en ciudades de Norteamérica, Australia y Europa, se ha creado un espacio de encuentro no sólo para ciclistas, sino para personas y familias que acudan a pasear y estar y a disfrutar de propuestas culturales.

Para empezar, con la música callejera. “Hace un par de años —explica Natalia— se condenó a la música callejera y creemos que la Ciclovía puede ser su nueva casa. La música comunica, acompaña y anima y coincide, por eso, con el espíritu de la Ciclovía”. Para programar esa música, se cuenta con la colaboración de Las Noches Bárbaras, que es el gran festival madrileño de músicas de la calle.

Este domingo toca el banjo, la tabla de lavar, el contrabajo y el swing de Old Dixieland Band en el Cicloscenario (a partir de las 12.30), cuya energía se obtiene del propio público a pedales; el flamenco de Antonio de La Pura y Machuca en la Plaza de Murillo (11.30); y el cabaret rodante (sobre una bici de carga) de Canti Vaganti (a partir de las 10.30). Este domingo toca parar el río de coches y ocupar el espacio que nos pertenece a todos y tratar de acostumbrarnos a hacerlo igual todos los domingos... Y el resto de días de la semana.

Sobre este blog

Me dedico al periodismo, la comunicación y a escribir libros como “Exceso de equipaje” (Debate, 2018), ensayo sobre el turismo que se desborda; “Biciosos” (Debate, 2014), sobre bicis y ciudades; y “La opción B” (Temás de Hoy 2012), novela... Aquí hablo sobre asuntos urbanos.

Etiquetas
stats