(Ampl.) Burgos admite que la jubilación parcial se ha usado como “forma privilegiada de jubilación anticipada”

Durante la clausura de la 'Jornada de Pensiones 2012' de BBVA, Burgos ha destacado que el Ministerio de Empleo y Seguridad Social enviará en los próximos días un informe al Pacto de Toledo “para que, después del correspondiente debate, haga las modificaciones que tenga que hacer”.

El secretario de Estado ha hecho estas declaraciones después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haya anunciado en una entrevista al diario estadounidense 'The Wall Street Journal' la intención del Ejecutivo de limitar las jubilaciones anticipadas.

Buegos ha resaltado que, actualmente, la Seguridad Social paga a 121.000 personas jubiladas de forma parcial, con una pensión media de 1.585,5 euros, lo que supone un gasto de 2.704 millones de euros.

En este sentido, el responsable de la Seguridad Social ha anunciado que el Ministerio de Empleo ya trabaja para reforzar la garantía de trabajo a las personas que quieren continuar en activo a pesar de haber cumplido la edad de jubilación y para que las personas de más edad “no se vean injustamente expulsadas del sistema”.

En cuanto a las jubilaciones anticipadas, Burgos ha recordado que se ha ampliado la penalización para las empresas de más de 100 trabajadores que despidan de “forma masiva” a los empleados de más de 50 años, “ya que el Gobierno cree que debe actuar de forma seria para no perpetuar la discriminación por edad en el mercado de trabajo”.

Asimismo, ha anunciado la intención del Ejecutivo de que la compatibilidad entre pensión y salario “juegue un nuevo papel y sea el tránsito hasta la jubilación”. Burgos ha señalado que para cubrir las “nuevas necesidades” de España “se debe superar este sistema tan rígido”.

DEFIENDE LA SOLVENCIA DEL SISTEMA.

Por otro lado, el secretario de Estado ha subrayado que la prioridad del Gobierno es reforzar el sistema de pensiones, y que “esta idea debe prevalecer, a pesar de que, hoy en día, es un modelo que está sometido al escrutinio por la gravedad de la crisis y por los retos de futuro que tiene por delante, como la aparición de nuevas demandas sociales”.

El responsable de la Seguridad Social ha defendido que el sistema “continúa siendo potente, amplio y diversificado, aunque la crisis le haya hecho perder más de 2,6 millones de contribuyentes, el 13,32% del total de cotizantes activos del sistema”.

Por ello, Burgos ha señalado que, para asegurar la supervivencia del modelo, “ha de reformarse permanentemente para asegurar que cumple con su objetivo: que haya unas pensiones adecuadas”.