Bruselas dice que gravar más a los ricos es una decisión nacional y aboga por “ampliar la base impositiva”

Bruselas también les recomienda en todo caso que estudien “dónde pueden ampliar la base impositiva, más que mirar siempre de forma arbitraria a aumentar los tipos impositivos”, ha explicado en rueda de prensa la portavoz de Fiscalidad del Ejecutivo comunitario, Emer Traynor, preguntada si el Ejecutivo comunitario respalda o no subir los impuestos a los más ricos de forma generalizada en toda Europa.

“Respecto a la cuestión de los impuestos a la riqueza y a los ricos, obviamente cada Estado miembro es libre de decidir cómo estructura sus propios sistemas” impositivos, ha recordado la portavoz.

El Ejecutivo comunitario ha rechazado pronunciarse a favor o en contra de “una medida fiscal específica” como la subida de impuestos a los más ricos porque, según la portavoz del área, “los sistemas impositivos son como un puzzle, con varios elementos que deben articularse juntos”. “Cómo se juntan es lo que determina si son (sistemas impositivos) competitivos y justos”, ha argumentado Traynor.

Con el objetivo de contribuir a crear sistemas impositivos “más competitivos” y “más justos” en los Estados miembros, el Ejecutivo comunitario también les recomienda “quizá revisar los tipos reducidos o las exenciones” fiscales contempladas en sus respectivos sistemas.

“Los Estados miembros deben centrarse en hacer sus sistemas impositivos más competitivos, pero también más justos”, ha insistido la portavoz, que ha dejado claro que las recomendaciones comunitarias “son una manera de aumentar los ingresos sin aumentar de hecho la carga total de la tasa impositiva en los sistemas”.

El Ejecutivo comunitario les recomienda asimismo analizar “cómo pueden mejorar su lucha” contra la evasión y el fraude fiscal, algo “fundamental, para contribuir a la justicia de los sistemas fiscales”, según Traynor, que ha recordado “la mayor carga impositiva” para los contribuyentes cuando existe “un elevado nivel de evasión fiscal”.

“Estos son nuestros consejos generales y fuertes recomendaciones a los Estados miembrosuando diseñen sus sistemas fiscales y después compete a cada Estado miembro mirar su propios sistemas impositivos, sus necesidades fiscales y diseñar sus sistemas fiscales en línea con estas recomendaciones”, ha precisado.

“Los Estados miembros son libres de decidir por sí mismos cómo diseñan sus sistemas impositivos, pero lo deben hacer de manera que se promueva el crecimiento, que sean justos y puedan ayudar a la competitividad de la economía en su conjunto”, ha concluido.