La CNMC pone el foco en perseguir el amaño de las licitaciones públicas

La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) centrará gran parte de su actividad este año en continuar desmantelando cárteles y, en particular, en perseguir el amaño de las licitaciones de contratos públicos por parte de las empresas que pujan por ellos.

Además, trabajará para hacer uso de la facultad que le permite imponer multas a los directivos o responsables de las empresas que participan en los cárteles, así como en impedir que las compañías que hayan formado parte de uno de ellos puedan concurrir a concursos públicos.

En 2015, la CNMC desmanteló 14 cárteles a cuyos integrantes multó con 506 millones de euros, cifra que representa al 90 % del total de sanciones impuestas por el organismo.

“Se trata de que las empresas con poder de mercado no lo usen para arrasar los intereses de otras empresas o de los ciudadanos”, ha afirmado el presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, quien ha asegurado que el organismo considera que tiene un importante papel que jugar en la “regeneración” que está viviendo España “en muchos frentes”.

Los cárteles suponen una “herramienta profundamente nociva para cualquier sociedad que lo sufre”, ha afirmado.

En el marco de esta lucha contra, la CNMC centrará su atención en las licitaciones públicas porque los acuerdos entre las empresas que pujan por ellos son gravemente perjudiciales para los ciudadanos ya que conllevan que cobren por ellos más de lo que habría resultado de una puja sin pactos, ha dicho el director de Competencia, Eduardo Prieto.

La CNMC, ha añadido, ha detectado que existe un gran desconocimiento por parte de las administraciones públicas que licitan y se encuentran ante concursos “dudosos” o intuyen que las empresas se están poniendo de acuerdo entre ellas.

En muchos casos, no saben cómo actuar, a quién dirigirse ni cómo atacarlo, por lo que la CNMC lleva seis meses dando charlas a las principales administraciones para facilitarse información en dicho ámbito.

Prieto ha apuntado que desmantelar un cártel no es nada fácil, pues se trata de acuerdos “secretos”, y, por ello, continuarán haciendo hincapié en el programa de clemencia, que permite a un integrante del cártel librarse de una multa por delatar a sus compinches y que revisarán para introducir mejoras.

La CNMC seguirá vigilando las operaciones de concentración, entre ellas la compra de DTS (Canal+) por parte de Telefónica, una operación que aprobó el año pasado pero que, en 2016, “seguirá dando lugar a un proceso continuo de vigilancia para garantizar que se mantiene la competencia” en los sectores de las telecomunicaciones y la televisión de pago.

El organismo también supervisará que todos los operadores pueden acceder y explotar los derechos para la retransmisión de la Liga española de fútbol.

En cuanto a la imposición de sanciones a directivos y no sólo a personas jurídicas, Prieto ha señalado que es una vía que se está explorando, al tiempo que ha desvelado que su dirección ya ha imputado a varias personas físicas.

“Consideramos que se trata de una herramienta con mucho potencial disuasorio”, ha explicado Prieto, quien ha apuntado que también explorarán la vía de que las empresas que hayan sido sancionadas por participar en un cártel no puedan acudir a concursos públicos.

No obstante, ha reconocido que esta última posibilidad aún tardará en llegar pues, según marca la normativa, sólo se podrá aplicar en actuaciones posteriores a octubre de 2015.