Cierra el Salón del Automóvil de Fráncfort, ensombrecido por el caso VW

El Salón del Automóvil de Fráncfort (oeste de Alemania) cerró hoy sus puertas tras diez días de una muestra ensombrecida por el escándalo de la manipulación de los datos de las emisiones de gases contaminantes en el grupo Volkswagen.

La feria recibió en su 66ª edición, celebrada desde el 17 de septiembre, 931.000 visitantes, 50.000 más que el año pasado, informó la Asociación de la Industria Automovilística (VDA) de Alemania.

En una superficie de 230.000 metros cuadrados 1.103 expositores de 39 países presentaron sus productos, de los que 219 eran primicias mundiales.

El ambiente, sin embargo quedó parcialmente ensombrecido por la revelación del escándalo de Volkswagen y las dudas que después se avivaron en torno al conjunto del sector, especialmente entre los fabricantes alemanes.

El presidente de la VDA, Matthias Wissmann, pidió en este sentido que no se prejuzge al conjunto de este sector “por la mala conducta de uno”.

Los coches eléctricos y los automóviles automáticos fueron dos de los platos fuertes de la muestra, que llevaba por eslogan este año “La movilidad conecta”.

Volkswagen ha reconocido que montó en once millones de vehículos un programa que identifica cuándo el turismo está siendo sometido a una prueba para que entonces el motor emita menos gases contaminantes y cumpla con los límites de las autoridades medioambientales.

De esos once millones, cinco son de la marca Volkswagen (el resto de otras marcas del grupo) y unos 2,8 millones fueron vendidos en Alemania.

El nuevo presidente del grupo Volkswagen, Matthias Müller, ha asegurado en una carta a sus cerca de 600.000 empleados en todo el mundo que aclarará completamente lo sucedido en torno a la manipulación.

El grupo anunció además ayer que prevé reparar en breve y de forma gratuita esta manipulación de todos los vehículos afectados, unos modelos diésel comercializados a lo largo de varios años en múltiples países.